El hidrógeno verde, que será producido en la Argentina con la llegada de importantes capitales extranjeros, es considerado como "el combustible del futuro" y generado mediante electrólisis a partir de energías renovables como la solar y la eólica, en las que nuestro país tiene un gran potencial para desarrollar proveedores competitivos y crear nuevos empleos.
El hidrógeno es el elemento químico más abundante del planeta y no es considerada una fuente energética en sí misma, sino un vector energético, ya que almacena energías generadas por otras fuentes, de manera tal que posteriormente pueda ser liberada en sistemas ya conocidos.
El proceso de producción de hidrógeno verde requiere contar con tres variables ineludibles y abundantes, ya que demanda viento o luz solar para la generación eléctrica renovable que se aplica al proceso de electrólisis; agua para separar el hidrógeno del oxígeno y una locación para instalar generadores eólicos o paneles solares.
En la actualidad, la generación de hidrógeno se realiza a partir de otras fuentes que motivan distintas definiciones según la fuente original: así puede ser a partir de petróleo o carbón (hidrógeno negro); de gas natural (hidrógeno gris); o a partir de gas pero con tecnología de captura y almacenamiento de carbono (hidrógeno azul).
Eco Edge Prime Power (E2P2) es un proyecto impulsado por un consorcio de 7 compañías —Equinix, InfraPrime, RISE, Snam, SolidPower, TEC4FUELS y Vertiv— que analizará una innovadora integración de celdas de combustible de óxido sólido con la tecnología de unidades de suministro ininterrumpido de energía (UPS) y baterías de iones de litio para ofrecer un suministro eléctrico primario limpio para las implementaciones de centros de datos.
Se espera que esto contribuya a reducir en hasta un 100% las emisiones de carbono producidas por las operaciones.
“La digitalización y la industria de centros de datos están aumentando a un ritmo acelerado y, por lo tanto, resulta aún más crucial agilizar nuestra aventura hacia un futuro ecológicamente sostenible”, mencionó Giordano Albertazzi, presidente de Vertiv para la región de Europa, Medio Oriente y África.
“Esto solo puede ser posible mediante la implementación de innovadoras tecnologías limpias como las soluciones de celdas de combustible que ofrecen un suministro eléctrico sostenible para el mundo digital. Vertiv se enorgullece de contribuir activamente con la iniciativa de prueba de concepto E2P2 y espera ofrecerles soluciones de potencia de próxima generación a sus clientes alrededor del mundo”.
Las celdas de combustible se consideran como una solución de potencia más limpia y silenciosa que puede mitigar la demanda de redes eléctricas urbanas. Pueden implementarse en el sitio en un campus de centros de datos y operar por medio de gas natural, biogás, gas licuado de petróleo (GLP) o hidrógeno verde, los cuales pueden transportarse y distribuirse en las redes de gases existentes.
El proyecto E2P2 marca un paso hacia la reducción del carbono, mientras se cumple con los requisitos de un suministro crítico altamente resiliente para los centros de datos. En el núcleo de esta visión se encuentra un enfoque centrado en el mercado que integra la innovación y la participación de los interesados para maximizar la aceptación y aprovechar las oportunidades de las celdas de combustible estacionarias como una fuente de suministro eléctrico primario descentralizado, eficiente y confiable para otras aplicaciones de escala industrial.
La iniciativa es financiada en parte con una subvención otorgada por la Asociación Europea para un Hidrógeno Limpio, del programa Horizonte 2020 de la Comisión Europea.