Tras un temporal con vientos de más de 150 km/h en Neuquén y Chubut, una gran nube de polvo avanza por la región central y podría alcanzar a Buenos Aires.
Una amplia nube de polvo podría llegar a Buenos Aires como consecuencia directa del temporal que golpeó la región patagónica el 18 de noviembre de 2025. Las ráfagas intensas en Neuquén y Chubut levantaron sedimentos y obligaron a declarar la emergencia climática en esas zonas.
El viento del sudoeste, que avanzó hacia el centro del país, ya redujo la visibilidad por debajo de los 5000 metros en localidades costeras bonaerenses. Esta misma corriente es la que mantiene la alerta en el Área Metropolitana, donde se prevé la posible llegada del fenómeno.
El suelo patagónico es propenso a desprender partículas en períodos de viento extremo. Cuando un temporal supera los 150 kilómetros por hora, como ocurrió esta semana, los sedimentos pueden elevarse y mantenerse en suspensión durante largas distancias
Aunque no se trata de un evento peligroso, sí genera inquietud por su impacto en la calidad del aire. Las partículas más finas pueden causar leves molestias respiratorias, sobre todo en personas con antecedentes de alergias o asma.
La llegada a la Ciudad de Buenos Aires dependerá del comportamiento del viento durante las próximas horas. Si la corriente se mantiene estable, el polvo podría notarse como una capa tenue en el cielo o como sedimentos sobre autos y superficies al aire libre.
Los organismos meteorológicos recomiendan precauciones simples, como cerrar ventanas en caso de notar el ingreso de polvo y evitar la exposición prolongada si se siente irritación. Por el momento, no se prevén afectaciones mayores.