Comentario LEANDRO GAVIRA. Para recibir a Mauro Camoranesi con los brazos abiertos, Lanús, con mayoría de suplentes, goleó por 3 a 0 a la Universidad San Martín de Porres de Perú, en un amistoso organizado con fines benéficos por la empresa Herbalife. Todos esperaban la presentación oficial del refuerzo de más renombre que trajo el Granate, pero finalmente eso quedó para hoy al mediodía, ya que se fue antes de que finalice el encuentro (ver aparte).
En relación al partido hay que decir que fue muy amistoso. Ninguno de los dos puso la piernita más de la cuenta y se vio una clara superioridad de los locales, que sin brillar fueron más que su oponente y ganaron merecidamente. Los peruanos siempre intentaron mantener la redonda a ras del piso, pero los del sur fueron mucho más efectivos.
La gente tuvo la chance de ver a Diego González, que regresó al club y a César Carranza, proveniente de Godoy Cruz. Justamente éste último fue importante para la apertura del marcador, ya que tiró una buena pared con Lagos, que finalmente asistió a Leandro Díaz. En la primera los de casa tuvieron más ataques, pero fue un discreto encuentro.
En el complemento hubo una catarata de variantes en los dos equipos, pero los de Gabriel Schurrer mostraron un mejor desempeño y liquidaron el encuentro con un gol de Carrasco y otro más de Leandro Díaz. En el último tanto, la asistencia fue de Carranza, una cara nueva, que rindió bastante bien.
Para que se muestre un poco, el técnico puso en cancha a Valeri, que se ganó la ovación de sus hinchas y jugó poco más de 15 minutos. El choque fue tomado como una fiesta y la cantidad de familias que había lo demostró. Lanús se quedó con la copa y luego hubo un show de fuegos artificiales para deleitar a los presentes.
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