De esta forma lo afirmó este jueves el vocero del FMI, Gerry Rice, al confirmar que en las próximas semanas se retomará el contacto directo con funcionarios de la Argentina para diseñar el programa financiero que reemplazará al stand by vigente desde 2018, por unos u$s 45.000 millones.
"Compartimos la opinión de las autoridades de que abordar los desafíos de Argentina requerirá un conjunto de políticas cuidadosamente equilibradas que fomenten la estabilidad, restablezcan la confianza, protejan a los más vulnerables y establezcan las bases para un crecimiento sostenible e inclusivo", señaló el funcionario del FMI.
"Nuestras conversaciones con las autoridades argentinas continúan. Esas discusiones entre el gobierno argentino y el equipo del FMI seguirán en el próximo período", agregó.
Además, el funcionario del FMI sostuvo que el Gobierno de Argentina "continúa trabajando en el diseño de su plan económico de mediano plazo y discutiendo las medidas específicas para su implementación, para apuntalarlo con un amplio apoyo político y social".
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