Alcanzó a $193.329; la suba interanual llegó al 40%. El transporte explica más de un tercio del gasto total y arrastra la mayor parte del aumento.
El gasto mensual en la canasta de servicios públicos que enfrenta un hogar promedio del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) sin subsidios alcanzó en julio los $193.329, lo que representa un incremento del 5,4% respecto de junio. En comparación con el mismo mes del año pasado, la suba fue del 40%, apenas por encima del nivel general de precios estimado para el mismo período.
Los datos surgen del Observatorio de Tarifas y Subsidios del Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP), que depende de la UBA y el CONICET, y abarcan los consumos de energía eléctrica, gas natural, agua potable y transporte público.
Según el relevamiento, el aumento mensual se explicó por ajustes tarifarios en todos los servicios públicos, aunque se destacó el impacto de los consumos estacionales de gas y electricidad, típicos del invierno.
En julio, la tarifa de agua se incrementó y el consumo se ajustó por la mayor cantidad de días del mes. En gas natural, el cargo fijo subió un 1,1% y el variable un 1,8%, a lo que se sumó un mayor uso por las bajas temperaturas. En energía eléctrica, el consumo creció, y se aplicaron subas del 0,7% en el cargo fijo y del 2,4% en el variable. El transporte público, por su parte, registró un aumento promedio del 5,1%, combinando las alzas del 3,5% en líneas urbanas porteñas y del 7% en las líneas interjurisdiccionales.
Desde diciembre de 2023 hasta julio de 2025, la canasta de servicios públicos del AMBA se encareció un 597%, muy por encima del 154% que acumuló el nivel general de precios. Sin embargo, la comparación interanual muestra una cierta convergencia, ya que el aumento del 40% en la canasta se alinea con la estimación de inflación del 36% para el mismo período.
Entre los rubros que más empujaron el gasto total interanual se destacó el transporte público, con un alza del 71%, que explicó 21 de los 40 puntos porcentuales del aumento total. Le siguieron agua (33%), energía eléctrica (26%) y gas natural (26%). El peso del transporte en la canasta representa el 36% del gasto total.
En relación con los ingresos, la canasta de servicios públicos de julio equivalió al 13,1% del salario promedio registrado estimado en $1.471.842.
Pese al aumento de los costos para los usuarios, en promedio, las tarifas en el AMBA cubren el 50% del costo de los servicios públicos, mientras que el resto es financiado por el Estado. Esta proporción varía según el servicio y el nivel de ingresos del hogar.
Durante julio, la cobertura tarifaria total creció levemente, situándose en 3 puntos porcentuales por encima del promedio de los últimos 18 meses (47%), debido al traslado parcial del aumento en los costos de generación. No obstante, incluso los usuarios N1 de altos ingresos continuaron recibiendo subsidios en sus facturas eléctricas, algo que muestra las dificultades del Gobierno para segmentar completamente los aportes estatales.
En ese marco, los principales subsidios económicos a los sectores de Agua, Energía y Transporte experimentaron una reducción real del 57% interanual al 17 de julio. En particular, los subsidios a la energía cayeron un 65%, los de transporte un 26%, y los de agua se redujeron un 100%.
Entre enero y junio de 2025, la poda de subsidios alcanzó los $1,52 billones, mientras que en ese mismo período el Gobierno registró un superávit fiscal primario de $1,73 billones, lo que sugiere que el ajuste en las transferencias fue clave en el resultado fiscal.
En el sector eléctrico, en promedio, los usuarios residenciales cubren el 48% del costo del sistema, mientras que el Estado nacional se hace cargo del 52% restante.