Este lunes 11 a las 22.15 por la pantalla de Telefé, Golpe al corazón, marcará el regreso de Sebastián Estevanez al núcleo de la telenovela que lo vio nacer. Y con ello, en la trama que completa junto a Eleonora Wexler como pareja protagónica, el debut de una nueva producción de Enrique su padre, sello distintivo en el género que, esta vez desembarca, con más ahínco que nunca, poniendo el foco en el tinte social.
Visiblemente sensibilizado con su sufrido personaje de Rafael Farías, un boxeador que luego de perder a su esposa embarazada en un accidente automovilístico se convierte en enfermero, y con el momento que atraviesa la ficción, la que defiende a capa y espada y proclama que se regularice para que sus compañeros actores tengan trabajo, este intérprete saca a la luz sus sensaciones ante el inminente estreno.
“Extrañaba la tele. Estamos muy contentos, conectados, muy felices. El libro, la producción, el equipo está buenísimo”, asegura Sebastián ansioso por dar a conocer el flamante culebrón que seguirá la línea de los anteriores Dulce amor y Camino al amor.
“Son capítulos como de una miniserie. Parecen de cine. De verdad cuando grabamos nos emocionamos, nos reímos. Me encanta el boxeo, pero eso es para contar la historia. La novela pasa por otro lado. Violencia de género, Malvinas, identidad. Nunca fue tanto. Tiene el tema social como eje, está muy presente porque en la clínica atienden a pacientes que son del público. La realidad del país amerita que esta novela no sea frívola”, entiende el muchacho que revela estar ante el rol más trascendente que ha realizado.
“Es el personaje de mi vida. La historia de vida que tiene el pibe es un ejemplo. Para mí es el mejor personaje. Estoy muy sensible. A veces me cuesta grabar. Me dicen: “No llores” y esperan a que se me caiga la lágrima y volver a grabar”, cuenta con emoción este actor que se le corta la voz al recordar lo que transitó su familia cuando él mismo sufrió un grave accidente en el que peligró su vida.
“Yo tuve un accidente de auto hace 20 años. Estuve en coma 4 un mes y medio. Viví en carne propia lo que pasa en el (Hospital) Fernández. Conozco las guardias, los enfermeros, los médicos, el clima de hospital”, garantiza retrotrayendo a la trama de Golpe al corazón centrada en un policlínico.
“Creo que es uno de los personajes más lindos que me escribieron y la historia le va a llegar a la gente. La historia es mucho más profunda comparada con las novelas que veníamos trabajando”, asegura un muy sencillo Estevanez respecto a la tira integrada por un elenco con grandes figuras como Miguel Angel Rodríguez, Viviana Saccone, Georgina Barbarossa, Claudia Lapacó, Marcelo De Bellis, Natalia Lobo, María del Cerro, Sabrina Rojas, Johanna Francella, Julián Serrano, Victorio D’Alessandro y Manuela Pal, entre otros.
En la inestable grilla de programación actual el temor a que el producto no funcione de la manera deseada ronda siempre. Sin embargo, este protagonista, confía a ciegas en la calidad de lo que se entrega. “Estoy nervioso, tenemos como cuarenta capítulos grabados y nunca me pasó de no saber la reacción del público estando tan avanzada la novela. Estoy ansioso pero muy seguro porque la historia está buenísima, los libros son un caño, la dirección es muy buena y el elenco un lujo”, indica quién intentará darle batalla a Marcelo Tinelli y su ShowMatch en el prime time nocturno para no competir directamente con Las Estrellas (lunes a viernes 21:30 por El Trece).
Sebastián Estevanez se pone serio para defender a su gremio y exigir que haya más ficción en la televisión abierta actual. De hecho, la suya será la cuarta, junto a la telecomedia de El Trece, Las Estrellas, el unitario Un gallo para Esculapio y la tira Cuéntame cómo pasó de la TV Pública.
“Hay un montón de compañeros para trabajar y poca ficción. Hay dos ficciones nada más. Sería bueno que haya dos ficciones por canales como había antes. Hay pocas productoras, cada vez menos y cada vez menos ficción. Todos los canales deberían tener mínimo dos o tres ficciones diarias constantemente, como pasó hace cinco años donde Telefé y El Trece tenían ficciones a la tarde y noche. También había ficciones en Canal 9, América y Canal 7, cosa que ahora no es así”, se queja el muchacho de porte trabajado en el gimnasio.
“La ley de medios debería ser un poco más estricta y exigirles a los canales que haya dos o 3 ficciones por canal y así todos los actores tendríamos trabajo”, desliza exigiendo una regulación. “La ley de medios tendría que actuar y exigir.
Por último, Apegado a la figura de su padre Quique Estevanez, se niega a ser estereotipado. “Trabajé con Yankelevich, trabajé para Telefé Contenidos, trabajé en México, trabajé para Pol-ka. Se da de trabajar con mi viejo. Se da. Es el destino, pero no es que yo no quiera hacer otras cosas”, señala Sebastián al tiempo que admite no tener demasiado contacto con su papá cuando trabaja.
“Deberían obligar a los canales a tener 2 tiras”
Las novelas argentinas se venden en todo el mundo Yo creo que se puede porque es barato hacer ficciones en Argentina ya que luego se venden a varios países, se venden los formatos”, reitera este galán. “Las productoras tienen miedo de invertir. Tendría que ser como obligatorio que cada canal tenga dos novelas como mínimo en el aire y son cinco canales así que por lo menos habría 10 novelas. Las novelas argentinas son de las mejores del mundo y se venden en Israel, en Rumania, en Estados Unidos, en México. Las novelas argentinas se ven en todo el mundo. Lo que pasa es que es más barato hacer un programa de panelistas o entretenimientos. No tengo nada con esos programas, pero es así. Es un tema de riesgos. Arriesgas menos haciendo un talk show o un formato de afuera. Arriesgas menos, pero yo creo que le novela argentina hay que defenderla”, vocifera Sebastián reclamando trabajo para sus pares y la vigencia de las grandes historias de amor que como antes concitaban la atención del espectador. “Tenemos que estar unidos y no estamos unidos. Es algo que no puedo entender. Debería haber más ficciones en la televisión. La ficción es como el fútbol, es parte de nuestro país, de nuestras raíces. Es como el fútbol, como el dulce de leche, como el vino tinto”, se apasiona mientras informa que hace un año que “contra viento y marea” vienen gestando la tira que saldrá a la luz el próximo lunes.
“Yo quiero hacer otras cosas en diferentes productoras. Lo que pasa es que las veces que me llamaron fui un bolu. Me ofrecieron Valientes y Amar después de amar cuando ya había apalabrado para hacer esto y no la pude hacer. Las cosas por algo pasan en la vida”, dice el actor que comenzó en tira Los Buscas de siempre junto a Pablo Echarri.
“Yo pedí por Eleonora, era la ideal”
En el género de la telenovela que bien sabe dominar Sebastián Estevanez, el erotismo que desplegaba junto a Carina Zampini en la inolvidable Dulce amor, se ubica en el podio mayor. Pero el hombre que busca la versatilidad dentro del rubro que ya conoce y lo identifica, hoy elige a Eleonora Wexler como su nueva “heroína”. Y sus palabras para con la actriz no son más que elogiosas. “La aprecio, la quiero la admiro y me parece una de las mejores actrices que hay en el país. Yo pedí por ella, me parecía que Eleonora era la persona ideal para acompañar este nuevo proyecto. Aprendo de ella y me da una clase de humildad y de actuación todos los días”, rescata de su flamante compañera en la trama de Golpe al corazón en donde él es el “Toro” Farías, un boxeador que luego de perder a su esposa en un accidente automovilístico se convierte en enfermero. Así el destino lo cruza con Marcela (Wexler), una médica que perdió la vista tras un ataque en el que intentaron abusar de ella y la “casualidad” hace que las corneas de la esposa fallecida de Farías sean las que le devuelvan la visión a esta mujer. Por supuesto no pasará mucho tiempo para que nazca el amor entre ella y el enfermero. En tanto que la intención de volver a trabajar con Zampini, pareja con la que Estevanez hizo su principal éxito, sigue vigente. “Tuvimos el sueño de trabajar con Carina de nuevo y hubo una reunión y no se pusieron de acuerdo. Algún día volveremos a trabajar juntos. A Carina la quiero”, señala.