Fiscalía de Barcelona pidió 9 años de cárcel para Dani Alves

En un hecho sucedido en la noche del 30 al 31 de diciembre del 2022 en la discoteca Sutton, en el centro de la capital catalana, la joven víctima, una prima y otra amiga suya fueron invitadas por Dani Alves y su acompañante con la intención de ir a tomar algo. La primera respuesta fue un no, pero luego las tres damas aceptaron la invitación.

Allí, el brasileño comenzó a acercarse a una de ellas. Primero fue una charla, luego la abrazó y tiempo después le arrimó la mano a la zona genital de la joven. Ella retiró su mano y empezó a alejarse de la situación.

Ya entrada la madrugada, Dani Alves se retiró hacia una puerta cercana e indicó a la supuesta víctima que la acompañara. Ella accedió al no saber que se trataba de una zona aún más privada y en la que ya no había cámaras de seguridad, según informó el sitio de noticias El Español.

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Una vez dentro de esa zona, Alves obligó a la joven a entrar al baño y "empezó a manosearla con ánimo lascivo y una clara intención de satisfacer sus deseos sexuales". Aunque ella intentó marcharse, él se lo impidió. Después, se sentó en el inodoro y como revela el Ministerio Público de España, le bajó los pantalones, la tiró del pelo, la hizo caer al suelo de rodillas y la golpeó varias veces en la cara mientras le exigía que le diga cosas obscenas.

La Fiscalía sostiene que la joven le solicitó al jugador "reiteradamente" que la dejara irse y salir de aquel lugar, pero que él se lo negó. Fue en ese momento cuando Dani Alves se puso en actitud violenta, mientras ella "se sintió impresionada y sin capacidad de reacción, llegando a sentir que incluso le faltaba el aire dada la situación de angustia y terror ante lo que estaba viviendo".

Posteriormente, el jugador manoseó nuevamente el cuerpo de la joven, intentó practicar sexo oral sin éxito para después penetrarla vaginalmente, sin preservativo. Más tarde, salió del lugar y dejó allí a la víctima, quien apareció unos minutos más tarde aturdida y desorientada.

La joven fue a hablar con su prima para pedirle que se marcharan, pero de camino a la salida se derrumbó y rompió a llorar hasta ser atendida por el personal de la discoteca que, justo en ese instante, activó el protocolo frente a agresiones sexuales.

Dani Alves y su amigo salieron "rápidamente" de la discoteca tras lo sucedido. Ahora, la Fiscalía pide 9 años de cárcel para el futbolista y asegura que la supuesta víctima padece "un trastorno de estrés postraumático de intensidad globalmente elevada, con repercusión funcional y deterioro en varias áreas del funcionamiento" y que por ello continúa en tratamiento psiquiátrico.

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Los letrados solicitaron, además, que se le aplique una multa de 150.000 euros para compensar a la víctima y 10 años de libertad vigilada, según lo difundido en el diario catalán Sport.

Este es el segundo pedido de encarcelamiento por parte de la Fiscalía de Barcelona tras el antecedente del pasado 20 de enero, al que finalmente no se hizo lugar.

Alves declaró en cuatro ocasiones, con cuatro versiones diferentes y en la última admitió que había mantenido relaciones sexuales consentidas y que había mentido para ocultar la infidelidad a su mujer.