El árbitro internacional, que pitó en el primer "chico" de la serie de tres entre Boca y River reconoció que "a donde me manda, voy". Respecto a los futbolistas, relató que "los 22 jugaron con el corazón".
A pesar de estar afectado por un brote alérgico en los ojos, Patricio Loustau condujo el primer clásico de la trilogía entre Boca y River sin inconvenientes. Al internacional le tocó pitar en la Bombonera, en el triunfo xeneize por 2 a 0, que abrió el juego a los cruces que se vienen por la Copa Libertadores. "Me animo a dirigir la revancha", lanzó.
"Yo vine de Sucre entre semana y soy un poco alérgico", indicó el árbitro en un contacto con Un Buen Momento, por La Red. Y dejó sentada su posición a pesar de los rumores: "Nunca estuvo en duda mi participación".
Loustau redobló la apuesta de cara a lo que se viene entre Xeneizes y Millonarios: "Yo me animo a dirigir la revancha. Donde me manden voy".
El 23º protagonista en cancha del Super del domingo tiró: "Vi que los 22 futbolistas jugaron con el corazón. Es un partido con enorme trascendencia y uno tiene que estar presto para resolver situaciones que se prensentan".
Admitió que todavía no vio todo el partido y cerró: "El arbitraje es asi, presenta distintas películas".
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