La Línea 60 seguirá sin prestar servicio

Los choferes tenían prevista ayer una reunión en la sede de la cartera laboral, pero fue suspendida, aparentemente por cuestiones burocráticas, y se esperaba que hoy se defina la realización de un nuevo encuentro.

Así, sigue sin resolverse el conflicto y la línea dejó sin servicio a sus 250 mil usuarios en una situación a la que los delegados calificaron como un lock out patronal, que proseguirá hasta tanto no se efectúen las reparaciones necesarias.

"No están dadas las condiciones para salir a manejar. El taller mecánico no está apto para arreglar los colectivos. Entonces, ¿cómo va a salir un colectivo que no está en condiciones?", señaló a DIARIO POPULAR el delegado Néstor Marcolin.

Si bien admitió que"hubo una inspección de varios organismos del Gobierno de la Ciudad y de la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT) donde se clausuraron los dos elevadores", lamentó que "tuvieron que esperar que hubiera un muerto para llamarnos, cuando hubo tres denuncias, entre marzo y junio, al Ministerio de Trabajo"

En cuanto a la reunión en Trabajo, Marcolin precisó que "se suspendió y no sabemos por qué", mientras que insistió: "Nos van a llamar en las próximas horas, pero nos parece una falta de respeto que lo hayan hecho después de cuatro días de muerto nuestro compañero".

Asimismo, el delegado insistió en que la paralización del servicio no se produce por una huelga. "Generalmente un paro por tiempo indeterminado lo votan los trabajadores, pero esta situación la determinan los organismos de control. Hay que ver con qué celeridad se ponen a hacer las reparaciones", expresó.

De todos modos, sentó la postura de los choferes, que están en estado de asamblea permanente tras la muerte de David Ramallo: "Antes de esto, en Constitución se clausuraron varios colectivos. Entonces, ¿cómo vas a trasladar pasajeros?. No vamos a permitir que salga un micro y que pase lo que pasó en la tragedia de Once".

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