La bombera Sofía Lacamoida del Cuartel Bomberos Voluntarios de Villa Celina se convirtió en una verdadera heroína al socorrer a una niña de tan solo un año de vida que no presentaba signos vitales.
“Para mi fue una eternidad” comenta Sofía acerca de la duración de la reanimación.
El martes cerca de las cuatro de la tarde, una beba llamada Meylín se encontraba sin respiración. Los padres comenzaron a pedir ayuda y visualizaron el cuartel que tenían enfrente. Los bomberos salieron de inmediato a buscar a la nena que se encontraba en los brazos de su padre y comenzaron a asistirla.
En la desesperación, la madre de la beba de un año se desmayó y uno de los hijos se desplomó en el suelo a llorar, pensando que Meylín ya había fallecido. Por suerte, la oficial Sofía Lacamoida le practicó RCP (reanimación cardio pulmonar) para lactantes y la salvó.
Finalmente, la madre le agradeció a la bombera por auxiliar a su beba y confesó entre lágrimas que para ella “ya se había ido” y era imposible volver a verla.