Australia está viviendo una de las peores plagas de ratones de su historia, que está arrasando con cultivos en estados como Queensland o Nueva Gales. Además, esta plaga se ha desatado en una zona que ha sufrido incendios, sequías e inundaciones de manera consecutiva en los últimos años, y a causa de eso también una invasión de arañas.
En estas condiciones, “la gente, literalmente, está atando cuerdas alrededor de sus pantalones si caminan entre ratones porque no quieren que se trepen por las piernas”, afirmó Steve Henry, un experto en ratones de la agencia científica gubernamental CSIRO, a VICE News.
Los ratones aparecen en casas, hospitales y dependencias públicas, pero la peor parte se la están llevando los agricultores. Los pequeños roedores no sólo arrasan con los campos de cultivo, sino que también contaminan los lugares donde se almacenan los alimentos para los animales.
Además, el Gobierno de Queensland informó que se está viviendo también un aumento de la leptospirosis, una enfermedad infecciosa que se transmite con agua contaminada por la orina de los animales infectados.
Estas plagas de ratones no son nada nuevo en esta zona. Los roedores suelen aparecer una temporada, pero pronto se desvanece su presencia con la llegada de los meses fríos.
Sin embargo, este año está siendo especialmente alarmante puesto que estos animales se han mantenido en el tiempo. Incluso algunos expertos dicen que la plaga podría llegar a Sydney en las próximas semanas cuando los ratones comiencen a llegar en las cargas de los camiones.
Pero no solo hay ratones, sino también una invasión de arañas. Se produjo a causa de las lluvias y las inundaciones, las arañas y sus correspondientes telas cubren varias extensiones de tierra para poder sobrevivir al temporal.
Los campos de la región de Gippsland, en el principal país de Oceanía, quedaron cubiertos de mantas de telarañas, por lo que lo llamaron un “apocalipsis de arañas”, mientras que el país continúa con una histórica plaga de ratones que afecta a los sembradíos.
Incluso la seria y prestigiosa institución científica oficial australiana CSIRO ha comentado el resurgir de las arañas en su cuenta en Twitter con cierta simpatía, además de algún detalle técnico.
La tela de araña cubre la hierba, los árboles, los matorrales e incluso algunas señales de tránsito en un pueblo del sur de Australia.