Dietrich, junto con la secretaria de Obras de Transporte, Manuela López Menéndez y el secretario de Transporte de la Ciudad de Buenos Aires, Juan José Méndez, presentaron el plan en la sede del Club Barracas Central, en un acto en el que también estuvo presente el presidente de esa entidad deportiva y de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), Claudio “Chiqui” Tapia.
La obra -que debería estar terminada a fines de 2019- contempla la construcción de un viaducto en altura de 5,6 kilómetros de extensión.
De esta forma, esta línea de ferrocarril que conecta localidades de los partidos de La Matanza, Merlo, Morón con el sur de la ciudad de Buenos Aires, para terminar en el barrio de Barracas, se extenderá hasta Constitución para mejorar la conectividad de los más de 4 millones de habitantes que viven a lo largo de la traza.
Desde la cartera ministerial precisaron que se trata del tercer viaducto ferroviario, luego del Mitre y del San Martín, aun en obras que se llevarán a cabo en el área metropolitana.
El viaducto comenzará en el barrio porteño de Nueva Pompeya, cabecera de la línea, y se extenderá hasta Constitución.
La primera etapa de los trabajos se extenderá desde la calle Tilcara hasta Taborda e incluye la construcción de un nuevo Centro de Transbordo a la altura de la avenida Sáenz, en Pompeya.
La segunda etapa será desde la calle Taborda hasta la actual estación cabecera de la línea Roca de trenes, en Constitución.
El Ministerio de Transporte señaló que la licitación de la segunda etapa se realizará en poco tiempo más e incluirá el trazado del tren en la sección del Club Barracas que corre junto a la vía.
Una vez finalizado el viaducto, se eliminarán en la zona 8 pasos a nivel con barrera, cruces que hoy son críticos como el de la avenida Sáenz, uno de los principales accesos a la Ciudad.