En el barrio El Sol de Virrey del Pino, el crimen de un vecino que trató de ayudar a un familiar en una pelea con un comerciante, y la liberación del presunto autor de su muerte, llevó a tres días de cortes consecutivos a la altura del kilómetro 35 de la Ruta 3. Posteriormente el reclamo se trasladó a la plaza de San Justo.
La semana pasada, David Leonardo Delgado -conocido como Vilo- de 33 años, intentó ayudar a su cuñado en una pelea entre varias personas que se desarrollaba frente a un comercio situado en la avenida Río de La Plata, en el barrio El Sol. Tras bajar de su automóvil, y acercarse al lugar, fue atacado por la espalda -a la altura de la cintura- con un cuchillo, que le provocó una profunda herida y una fuerte pérdida de sangre, por lo que cayó al suelo y falleció casi de inmediato.
El presunto autor del hecho, un carnicero, fue detenido rápidamente por la policía, pero por falta de pruebas, la Justicia dispuso a las 24 horas su libertad, lo que generó la ira de los lugareños.
Y bajo la consigna de "Justicia por Vilo", cortaron el sábado, el domingo y el lunes la Ruta 3 a la altura del kilómetro 35, un lugar en el que prácticamente no hay caminos alternativos, y generó la queja de quienes debían trasladarse, en especial el lunes, cuando regresaban sus hogares.
El martes, la protesta se trasladó a la plaza San Martín de San Justo -frente al municipio- donde los familiares y amigos de Delgado cuestionaron duramente al juez que interviene en el hecho, por haber dispuesto la libertad del presunto autor de su muerte.
Por otra partes, el martes habitantes del barrio Los Pinos de Villa Luzuriaga cortaron el Camino de Cintura en el cruce con Carabobo, para reclamar justicia por Diego Frías, de 28 años, que fue asesinado de cinco balazos en la madrugada del viernes en Larrazábal y Los Andes.
Vecinos y familiares del joven se concentraron donde ocurrió el crimen, y a continuación marcharon hasta la avenida Monseñor Rodolfo Bufano (Camino de Cintura), donde realizaron un corte de tránsito que se prolongó varias horas, y que levantaron luego de que las autoridades policiales se comprometieran a detener a los que lo mataron, que ya estarían identificados.
Para los familiares de Frías, su crimen fue consecuencia de una equivocación por parte de quienes le efectuaron los disparos mortales; tienen la idea de que intentaban vengar el asesinato de un familiar, que ocurrió en julio en el barrio Los Pinos, como una forma de realizar justicia por mano propia.
Precisaron que el joven había salido a realizar una compra en inmediaciones de su casa, que escucharon cuando lo acribillaron desde un automóvil, para encontrarlo luego en el piso, con dos disparos en la cabeza y tres en el pecho.