Policiales
Analizan si el portero habría solicitado o recibido ayuda de algún conocido para desechar el cadáver de la adolescente
Los investigadores del crimen de Ángeles Rawson analizan dos llamados telefónicos que se realizaron el día del homicidio desde la portería del edificio de Ravignani 2360, ante la sospecha de que el portero detenido pudo haber solicitado o recibido ayuda de algún conocido para descartar el cadáver de la víctima, informaron fuentes judiciales.
Se trata de dos llamadas salientes realizadas a las 12.20 y las 17.40 de aquel 10 de junio, desde el teléfono de la casa del octavo piso del encargado Jorge Mangeri -cuyo número comienza con 4777-25xx- hacia una misma persona.
Las fuentes consultadas indicaron que el destinatario de los llamados es "un conocido" de Mangeri de quien prefirieron no revelar más datos para preservar la investigación, ya que ahora está bajo investigación.
La sospecha desde la fiscalía de Paula Asaro y el juzgado de Javier Ríos es que Mangeri pudo haber solicitado ayuda de ese conocido para descartar el cadáver de Ángeles.
En tanto, fuentes judiciales confirmaron hoy que el perito psiquiatra de la defensa, Adolfo Méndez, presentó hoy formalmente ante el juez Ríos su renuncia a la causa, tras la polémica hipótesis que hizo pública respecto a que las lesiones genitales que presentaba Ángeles podrían ser producto de una relación sadomasoquista consentida.
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