Según la denuncia, el hecho ocurrió con un nene de 11 años en el interior de la Escuela 38. Su maestra, directivos y ocho alumnos habrían sido víctimas del ataque. Afirman que el padre amenazó con quemar la escuela si echan al niño.
Un nene de 11 años está en el centro de la polémica tras atacar a su maestra con un elemento cortante, para luego agredir a otros docentes y directivos, en un episodio ocurrido dentro de una escuela primaria de Quilmes.
Padres de alumnos denunciaron que ocho alumnos fueron atacados desde el comienzo de clases y exigieron la expulsión del pequeño, cuyo padre presuntamente amenazó con prender fuego la institución educativa si echan al chico. Los hechos se registraron en la Escuela 38, ubicada en la calle Esteban Echeverría, esquina Lavalle, de la mencionada localidad del sur del conurbano.
"La maestra de quinto grado está con licencia médica, bajo estado de shock, porque este chico la atacó con un arma blanca. Otros docentes y directivos también fueron agredidos", dijo una mujer, madre de una compañera del chico, en la puerta del establecimiento.
De acuerdo a lo denunciado por los padres, el año pasado se sucedieron diferentes hechos de violencia que tuvieron como protagonista al niño. "Hubo reuniones todo el año pasado, nos prometían que se iba a realizar un seguimiento del caso, porque acá el problema es la familia que tiene. El padre es muy violento, hasta amenaza con quemar el colegio si lo echan. La madre también es problemática. Pero lo concreto es que no se hizo nada, y los inconvenientes cada vez se fueron agravando", señaló la denunciante, que actuó como vocera de los padres.
En el marco de los detalles de los hechos, los familiares de alumnos explicaron que el niño utilizó en reiteradas ocasiones "una lapicera que tiene punta filosa, como una faca". En ese sentido, explicaron que "los problemas empezaron desde que arrancaron las clases de este año, y ya son ocho los nenes que sufrieron cortes". "La maestra fue agredida con brutalidad. No quiere volver a la escuela, porque está con miedo. Nosotros la apoyamos. No tiene garantías y nuestros hijos tampoco, porque este chico está descontrolado", expresó la mujer.
Dentro de las medidas que se habían tomado respecto a la conducta del chico, se pudo averiguar que las autoridades decidieron en este ciclo lectivo acortarle la carga horaria en la institución.
"No sirvió para nada, porque cuando estaba hacía lo mismo, agredir a los otros compañeros y a su propia maestra. En el último hecho no se salvó nadie, hasta el director fue agredido", dijo la mujer. "Es duro todo esto. Da pena, porque tiene hermanitas que vienen acá, pero los padres no lo queremos más. Ni a su familia", cerró la denunciante.