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El delincuente muerto en Fuerte Apache era investigado por el robo al secretario general adjunto del SMATA, Mario Manrique.
El joven delincuente, Santiago Facundo Luna (19), falleció luego de un tiroteo con la policía dentro del barrio Ejército de Los Andes, conocido como Fuerte Apache,del municipio bonaerense de Tres de febrero, luego de una persecución iniciada tras el robo de dos vehículos en la zona junto a otros dos cómplices, informaron fuentes policiales y judiciales.
Cabe resaltar que Luna estaba siendo investigado por el robo a Mario Roberto Manrique, secretario general adjunto del Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (SMATA), quien recibió un disparo en el abdomen en un hecho ocurrido en marzo último en El Palomar.
Todo empezó cuando Luna junto a otros dos cómplices robaron una camioneta Ford Ranger color azul en la localidad de Morón. Tras ello, se dirigieron hacia Villa Pineral, en la localidad de Ciudadela, partido de Tres de Febrero, donde interceptaron a un hombre que descendía de su Citroën Aircoss sobre la calle Villegas al 4600.
La policía al enterarse de lo sucedido comenzó un operativo cerrojo para poder recuperar los vehículos robados.
Una vez que la camioneta ingresó al barrio "Fuerte Apache", se inició una persecución hasta el cruce de las calles Madero y De Vicenzi, donde uno de los delincuentes bajó y se fugó a pie. Esto fue el comienzo del tiroteo, dado que el delincuente mientras que corría les disparaba a los efectivos policiales. El asaltante resultó herido de un disparo en el fémur derecho, por lo que fue trasladado al Hospital Carrillo, donde falleció producto de la herida.
Luna ya tenía un pedido de captura por la infracción a la Ley 23.737 por la comercialización de estupefacientes con fecha del 16 de noviembre de 2020.
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En la camioneta se halló una pistola Bersa calibre 40, añadieron las fuentes. En tanto, se tomó conocimiento que el Citroën Aircross sustraído en Ciudadela fue hallado en cercanías del barrio Carlos Gardel, en El Palomar.
El fiscal Fabricio Iovine, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1 de San Martín, ordenó que se secuestren las armas de los policías que intervinieron en el enfrentamiento, pero no los detuvo ni aplicó ninguna medida preventiva hacia ellos, ya que consideró que se trató de una legítima defensa.
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