Un prostíbulo que funcionaba en un edificio del Microcentro porteño, en la calle Suipacha al 600, fue desbaratado por la Policía de la Ciudad y rescataron a once mujeres que eran sometidas sexualmente.
El procedimiento se dio después de un año de investigación y los tres departamentos que se allanaron fueron clausurados por la Agencia Gubernamental de Control (AGC).
Además, quedó detenida la mujer que regenteaba a las víctimas.
Los allanamientos los encabezó la División Trata de Personas de la Policía de la Ciudad, ordenado por el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional 11, subrogado por Julián Ercolini, y ante la Secretaría 21 de Carolina López Arnaiz.
En la pesquisa previa al allanamiento, los policías lograron determinar que en tres departamentos de distintos pisos una mujer regenteaba en supuesto acuerdo con el dueño de los departamentos un prostíbulo en el que las mujeres tenían que dejar el 60 por ciento de lo que le pagaban sus clientes, como pago de alquiler, seguridad y elementos de higiene.
Al procedimiento asistió personal del Programa Nacional de Acompañamiento de Víctimas del Delito de Trata, que entrevistó a 13 víctimas, para brindarles asistencia y asesoramiento, aunque ninguna de ellas se acogió al programa.
Los oficiales detuvieron a la encargada del prostíbulo, paraguaya de 38 años, y secuestraron documentación, entre ellos un cuaderno con anotaciones sobre el trabajo de cada mujer, 500 mil pesos, folletería, geles íntimos y profilácticos, entre otros elementos, y nueve celulares.