El crimen, por el que fue detenido como partícipe el hermano del presunto autor de los disparos, está relacionado a un ajuste de cuentas por drogas.
Un hombre de 37 años, padre de ocho hijos, fue asesinado de cinco tiros en la puerta de su casa en Los Polvorines, y los investigadores aseguraron que el sospechoso del crimen es un hombre que estaba prófugo por haberse sacado la pulsera magnética que monitoreaba su prisión domiciliaria.
Fuentes policiales confirmaron que el crimen, por el que fue detenido como partícipe el hermano del presunto autor de los disparos, está relacionado a un ajuste de cuentas por drogas.
El subsecretario de Política Criminal del Ministerio de Seguridad provincial, César Albarracín, aseguró que el hombre que se cree que disparó y mató a Diego Daniel Morales, de 37 años está prófugo desde el 5 de diciembre de 2008.
¿Enemigos íntimos?
Los investigadores aseguraron que todo comenzó el domingo, entre las 22 y las 23, en una casa ubicada en Monseñor D’Andrea 1835, de esa localidad del partido de Malvinas Argentinas, donde Morales vivía junto a su esposa y sus ocho hijos.
Según pudieron determinar los pesquisas, a esa hora llegaron dos hombres a bordo de un auto y bajaron en la puerta de la casa de Morales, tras lo cual tocaron timbre y preguntaron por el dueño de casa.
La hija de Morales contó luego a los investigadores que esos hombres habían concurrido a su casa otras dos veces durante la tarde, y que en ambas oportunidades su padre le pidió que les dijera que no estaba. “Evidentemente lo conocían de antes, lo que nos hace pensar en que no se trató de un hecho de robo”, dijo un jefe policial.
Cargador completo
En el marco de la tercera “visita”, los delincuentes no se quedaron con esa respuesta, sino que saltaron una medianera y, al ver a Morales, le exigieron salir a la puerta. Una vez allí, le apuntaron con una pistola calibre 9 milímetros y uno de ellos le disparó un cargador completo sin mediar palabra.
Según los investigadores, Morales recibió cinco disparos en el cráneo, cuello y abdomen, por lo que murió cuando era atendido en un centro asistencial de Malvinas Argentinas. En el lugar, los efectivos de la comisaría de Los Polvorines secuestraron nueve vainas servidas del calibre 9 milímetros y cuatro plomos deformados del mismo calibre.
“No existió el robo. Entraron y dispararon sin mediar palabra”, dijo un jefe policial que participa de la investigación del hecho, quien aclaró que por los primeros datos obtenidos en el lugar del hecho se trataría de un ajuste de cuentas vinculado a las drogas. “Por lo que nos contó la familia, la víctima conocía a sus victimarios”, aclaró el investigador.
Sujetos peligrosos
Los delincuentes huyeron y horas después fue detenido mientras caminaba por Colpayo y Gabriela Mistral, de Los Polvorines, Gastón Gerardo González, de 25 años, hermano del prófugo cuya orden de detención ya fue firmada por la justicia de Garantías de San Martín.
En tanto, la esposa del hombre asesinado contó a la policía que el que disparó “se llama Eduardo González y vive con su hermano -ahora detenido- a cien metros” de la casa de la víctima. Fuentes policiales aseguraron que ese hombre había estado detenido por última vez en el marco de una causa robo, tenencia de arma y resistencia a la autoridad, pero que en el 2005 salió de la cárcel con una libertad morigerada.
Fuentes policiales dijeron que la causa está en manos de la fiscal de instrucción de Malvinas Argentinas, descentralizada del departamento judicial San Martín, Liliana Tricarico.