Política
Desde China, el Presidente negó que haya habido una ola de despidos desde su asunción. Además, prometió que el año que viene el país crecerá, como mínimo, al 3,5 por ciento
Mauricio Macri atraviesa su última etapa en la Cumbre del G-20 que se lleva a cabo en China, pero se hizo tiempo para opinar acerca de la realidad del país a 10 meses de su asunción. En una entrevista concedida a Radio Mitre, el Presidente negó que haya habido una ola de despidos y aseguró que "se perdieron entre 70 y 100 mil empleos". El mandatario contradijo, así, las cifras presentadas por el INDEC en su presentación del 23 de agosto, en la que confirmó que la taza creció en el último año un 2,7 por ciento -lo que representa, al menos 300 mil empleos menos-.
A pesar de la diferencia con el Instituto de Estadísticas, el líder de Cambiemos fue optimista a futuro y volvió a poner 2017 como el inicio del crecimiento, "después de un año de recesión y casi cinco años de estancamiento". "Hubo retracción en algunos sectores, empezando por la obra pública, que heredamos parada, y después se empezó a recuperar", declaró acerca de las razones que llevaron al retroceso.
Entre otras razones, destacó que la mejoría llegará de la mano de Brasil:" Acá, estuve con el presidente Temer y ellos están optimistas que el año que viene van a volver a crecer, eso va a ser muy bueno para las áreas de producción de la Argentina, sobre todo para la industria automotriz".
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En cuanto a los focos de conflicto interno, entre los que se destacan la Marcha Federal del viernes pasado, Macri comentó que tiene "confianza" en el diálogo inicia con la CGT. Y agregó: "Acá lo único importante es generar trabajo de calidad para reducir la pobreza. Hay que seguir dialogando y escuchándose, nadie tiene derecho a enojarse".
En la misma dirección que el ministro de Hacienda, Alfonso Prat-Gay, el Presidente destacó la importancia de los acuerdos sociales: "Ojalá podamos seguir haciendo pactos sociales, económicos, por sector, por lo menos, para lograr una agenda común importante, que es lo razonable, limitar las agendas de discusión".
Respecto de las versiones que le adjudicaban un retroceso en el plazo previsto para revertir la crisis, argumentó: "Las cosas iban a ser secuenciales. Me comprometí a levantar el cepo y lo hicimos a la semana de asumir. Me comprometí a cerrar el tema holdouts en semanas y la cerramos antes de marzo, cuando el consenso era que se necesitaba año y medio. Nos comprometimos a liberar todas las exportaciones y se hizo. Yo dije que en el segundo semestre iba a bajar drásticamente la inflación y nadie se imaginaba que en agosto íbamos a tener el índice que se va a publicar".
Por último, sostuvo que el crecimiento de la economía que se prevé para el 2017 será alto. "Nosotros creemos que 3,5 por ciento. Este es el ciclo natural. Creemos que las cosas van a funcionar, poco a poco están funcionando", concluyó.
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