El debate sobre la legalidad del aborto genera grietas en el núcleo del oficialismo. El jefe de Gabinete, Marcos Peña, aseguró este martes que Mauricio Macri habilitó el debate sobre el aborto "por la convicción de la necesidad de dar un diálogo democrático", rechazando los dichos de la diputada nacional Elisa Carrió que había afirmado que al Presidente le "dijeron que ganaba el no".
La legisladora-una de las armadoras de la alianza Cambiemos- ha expresado en reiteradas oportunidades su rechazo a la despenalización o legalización de la interrupción voluntaria del embarazo, había afirmado en la noche de lunes pasado que al jefe de Estado "le dijeron que el 'no' iba a ganar por amplia mayoría y (le comunicaron) una necesidad de debatirlo que no existía".
Ante esas declaraciones, Peña salió a desmentir esa versión: "Son opiniones de ella. La decisión del Presidente fue por la convicción de la necesidad de dar un diálogo democrático".
En diálogo con radio La Red, el ministro coordinador aseguró que el Gobierno quiso "canalizar un debate parlamentario que estaba pendiente en 35 años en democracia, bajo el liderazgo del Presidente".
En ese sentido, Peña destacó "el valor del diálogo democrático en paz para buscar puntos en común y avanzar como democracia", a la vez que indicó que "sectores como la Iglesia, que pueden tener una opinión contraria al aborto, también entendieron que eso es parte de nuestra identidad democrática".
Además, el jefe de Gabinete hizo alusión a las declaraciones de la vicepresidenta, Gabriela Michetti, que se había expresado en contra del aborto incluso para casos de violaciones.
"Habla desde su postura individual, como todo Cambiemos. Lo que me parece más importante es la valoración de un debate muy respetuoso que tiene que seguir en ese tono, respetando las distintas posturas y buscando el consenso necesario no solo para la discusión de la ley sino para los otros muchos temas que surgieron como el tema de educación sexual", concluyó.