Banfield hizo tablas con el Ferroviario en Santiago del Estero

El Taladro supo abroquelarse en su última línea y evitó cualquier tipo de zozobra, y por eso el local nunca logró desnivelar, más allá de haber tenido el protagonismo prácticamente siempre del balón, con un juego colectivo simple.

Al anfitrión le faltó vértigo para sellar su cometido, y la visita sacó rédito, adormeciendo la pelota y jugando con el tiempo, dado que no veía con desagrado la paridad.

En ese sentido, a medida que corría el reloj el club de la región se fue amigando con el resultado, y por eso no extrañó que sobre el final sufriera más de la cuenta, erigiendo en figura al arquero Facundo Sanguinetti, con un par de intervenciones clave para mantener el arco en cero.

Para el Albiverde se trató de un tanteador que, si bien no conforma, al menos sirve para romper con el dolor que implicó haber perdido con Defensa y Justicia en la actuación pasada en Florencio Varela.

Aquel 1 a 0 en contra fue un golpe difícil de asimilar, pero este 0 a 0 pudo acomodar el semblante para perfilarse para lo que sigue con otra expectativa, entendiendo que será vital hacerse fuerte en casa para mejorar las cifras.

Por lo pronto, el trámite que se asoma en el calendario no se prevé sencillo, dado que se chocará con Instituto, un elenco en plena levantada y que lucha cerca de la vanguardia del escalafón, especialmente después de la goleada que propinó al Halcón en Córdoba.

Para ese cotejo es factible que haya una baja sensible, que tuvo que salir en este compromiso en la provincia norteña por una lesión. Se trata del defensor Guillermo Enrique, que apenas pudo disputar 25 minutos, siendo reemplazado por Ezequiel Bonifacio.