El Cervecero tendrá un cruce vital en la lucha por acceder al Reducido y por delante estará un adversario envalentonado que se hace muy fuerte en su campo.
Quilmes tendrá una difícil excursión al norte del país para visitar a Gimnasia y Esgrima de Jujuy, en el marco de la fecha 35 del calendario en la zona A de la Primera Nacional, duelo vital en la lucha por acceder al Reducido y soñar en grande con el ascenso a la máxima categoría del fútbol argentino.
El Cervecero, que viene de vencer por la mínima diferencia a Güemes de Santiago del Estero en el estadio Centenario, medirá fuerzas con un adversario que no pasó del empate en 1 con San Miguel, en Los Polvorines, pero que transita con similares estadísticas en la competencia, dado que ostenta 51 unidades en el escalafón, apenas una más que el Decano, ambos inmiscuidos cerca de la vanguardia y asentados en puestos de liguilla.
A falta de cuatro jornadas para el cierre del certamen, la expectativa de los conducidos por Sergio Rondina es confirmar la plaza en los play-off, y el compromiso se evidencia trascendental pues se trata del escollo con otro encumbrado, con el que disputa la tercera colocación en la grilla, a sabiendas que tanto el líder San Martín de Tucumán como el escolta San Martín de San Juan están muy lejos, ya inalcanzables.
Por lo pronto, no se pueden dormir en los laureles, dado que hay sólo cuatro unidades de diferencia con el lote que ya está fuera del espacio de privilegio, entonces un tropezón sería difícil de digerir y obligaría a hacer cuentas desde temprano para saber si el club de la región está en condiciones de luchar por el objetivo estelar.
En ese sentido, además de lo que suceda en su propio cotejo, la Blanquita estará pendiente de lo que ocurra con otros emparejamientos, especialmente los inmediatos perseguidores. ¿Quiénes? San Miguel está con los mismos 50 puntos; Ferro y All Boys ostentan 48 y Estudiantes de Buenos Aires 47, hasta ahí todos dentro del Reducido, pero a la espera está Racing de Córdoba, que suma 46, y si bien ya jugó y empató con Chacarita como local, puede sobrepasarlos en el corto plazo y espera una mano de sendos contrincantes; y también Deportivo Maipú.
¿Cuáles serán los cruces de ellos? El Trueno Verde viajará justamente a Mendoza para visitar al Depor, en un trámite más que complicado, mientras que los de Caballito y los de Floresta tendrán acción compleja al recibir a Nueva Chicago y San Martín de San Juan, respectivamente. Y son difíciles porque mientras el Torito es el mandamás de su bloque, y ahora toca afrontar el interzonal, el otro Verdinegro es el segundo en el escalafón en el propio bloque y es el único que todavía tiene chances matemáticas de pelear por la gloria ante el Ciruja.
Ya con la vista en el Pincha de Caseros, el compromiso que afrontará será en Mar del Plata con Alvarado, un adversario que viene en levantada y que, con posibilidades de acceder a la liguilla, apela a su fortaleza como anfitrión para intentar dar el zarpazo.
Por lo pronto, volviendo a Quilmes, lo concreto es que el plantel confía en hacer valer su jerarquía y repetir el logro de la primera rueda, cuando se venció al Lobo norteño por 2 a 1 en la región. Fue gracias a los goles de Martín Giménez, de penal en el arranque del duelo, y Tomás González, cerca del final, para poner una ventaja que se había anulado por el empate transitorio de Blas Palavecino.
Ese elenco lo dirigía todavía Darío Franco, y ahora con Rondina la pretensión es ganar a domicilio y consolidar una mejoría, dado que el Cervecero acumula cuatro juegos sin tropezones, con dos empates y misma cantidad de halagos, aquellos a domicilio y los otros en casa.
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