Un detenido y más de 400 dosis de cocaína secuestradas tras tres allanamientos

Para dar con el paradero se precisaron de muchas tareas encubiertas por parte de los uniformados de la Comisaría Cuarta de Quilmes. Así las cosas, fue necesaria también la colaboración de los allegados al barrio, que fueron quienes delataron al dealer capturado en reiteradas ocasiones. En sintonía, pudieron cerrar de la mejor manera posible esta primera parte, pero claro está que ahora tienen que llegar al lugar donde se ubica el búnker mayor, debido a que entienden que esto no termina aquí.

Todo comenzó semanas atrás, cuando un grupo de vecinos se hartaron de estas transacciones ilegales a plena vista y decidieron comunicarse de manera anónima con el 911. Allí explicaron que había un sujeto que vendía estupefacientes y que sembraba temor en los alrededores. De inmediato empezaron a rondar los agentes encubiertos por la zona y juntaron pruebas para entregar a la Fiscalía.

Fueron imágenes, videos, seguimientos, hasta que consiguieron tres órdenes de allanamiento para una vivienda en Solano y otras dos en Varela. Los mismos se dieron con el auxilio del Grupo de Apoyo Departamental (GAD) y el Grupo Táctico Operativo (GTO) de la Comisaría Cuarta de Quilmes. Resultó detenido un hombre de 48 años y secuestraron gran cantidad de drogas ilícitas envueltas y listas para su pronta comercialización.

En el primer operativo, llevado adelante en la finca solanense, además de capturar al sindicado, lograron secuestrar 23 envoltorios de clorhidrato de cocaína, cartuchos de escopeta calibre 16 y un teléfono celular que será peritado con la intención de obtener información relevante para la causa.

En el siguiente procedimiento realizado en Varela, se llevaron también 23 envoltorios, una balanza de precisión y elementos de corte y fraccionamiento de sustancias. Lo mismo sucedió en el último allanamiento, en el mismo distrito, aunque en mayor escala, ya que de allí levantaron 331 bolsitas no solo con clorhidrato de cocaína, sino que también con pasta base, que es la sustancia más barata y dañina del mercado ilegal.

El caso quedó en manos de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio (UFIyJ) número 20, a cargo del doctor Gustavo Araoz, quien ordenó el peritaje de todo lo secuestrado y el traslado del aprehendido a sede judicial para tomarle testimonio y seguir adelante con las tareas de investigación sobre esta presunta red de comercialización de estupefacientes.