Mungo y Argentina, a las semis del Sudamericano de basquet

Las Gigantes completaron la ronda inicial de forma invicta, pues previo a despachar a las locales por 81 a 42 vencieron, en orden sucesivo, a Brasil, Uruguay y Bolivia, lo que permitió quedar en lo más alto de la tabla de posiciones y perfilarse para lo que serán los play-off.

En ese sentido, la mira se posa en Venezuela, rival al que habrá que enfrentar en pos de recalar en el compromiso por la gloria, con el sueño de mejorar el rendimiento de 2022, cuando el torneo continental se afrontó en San Luis y las chicas albicelestes quedaron en la segunda colocación, por detrás de Brasil, el campeón.

¿Qué ocurrió en el juego con las anfitrionas? Las conducidas por Gregorio Martínez replicaron el nivel expuesto en los cruces previos, con un juego colectivo notable y una efectividad individual de envergadura, con Macarena D'Urso como principal artillera con 17 unidades, mientras que completaron el podio del goleo las jóvenes Amaiquen Siciliano y Diana Cabrera, aquella con 13 y la otra con 11.

En cuanto a la exponente de la región, sus 6 puntos estuvieron repartidos en un triple, dos dobles y un acierto libre, mientras que añadió a su registro particular cuatro rebotes -tres defensivos y uno ofensivo- y una asistencia.

Así la situación, ayudó a un combinado nacional que tuvo, especialmente en el primer tiempo, una labor superlativa, habiendo sacado una diferencia imposible de revertir para después. Es que Argentina cerró el primer cuarto 22 a 3 a favor, con una faceta defensiva que anuló cualquier atisbo de reacción del contrincante, más allá que en el segundo hubo una mejoría del dueño de casa.

Desde allí se fue diseñando una alegría que posibilitó extender la racha y enfocarse en lo que sigue en la competencia, entendiendo que no sólo la expectativa radica en llegar a la final para pelear por la vuelta olímpica, sino también porque la pretensión es arribar a la Americup del próximo año, donde también se darán cita conjuntos del norte del continente, entre ellos dos potencias como Canadá, y fundamentalmente, Estados Unidos.

Además de la llave confeccionada entre Argentina y Venezuela, del otro lado del cuadro se evidencian Colombia, el mejor de la otra zona, y Brasil, que intentará defender la corona.

La pretensión albiceleste será despachar a las caribeñas y confiar en revalidar credenciales en la final, que podría poner en el camino a las cafeteras, de gran campaña, o a las brasileñas, potencias que, más allá del debut esquivo, pueden recuperar su semblante y repetir el título de hace dos años.