Dos funcionarios y dos empleadas del área de Salud del Municipio de Quilmes fueron separados de sus cargos, tras la publicación en redes sociales de varias fotografías en las que se los puede observar fumando cigarrillos armados que serían de marihuana.
El escándalo involucró a César Altea, titular del servicio de emergencias CREM, y a Daniel Spena, director del Dispensario Ramón Carrillo de Quilmes Oeste, así como también a dos mujeres que cumplían funciones administrativas.
A través de las redes sociales se filtraron fotos de una reunión, en lo que parece ser la vivienda de uno de ellos. Quienes estaban allí aparecen en las fotografías fumando presuntamente marihuana, en un ámbito de risas y alegría entre amigos. En las imágenes se observa cómo arman los supuestos porros y, además, una pipa de agua que usualmente se utiliza para el consumo de esa sustancia.
"La razón principal por la que decidí separarlos de sus cargos es por las fotos. No voy a permitir eso ni cualquier otra anomalía", explicó el funcionario.
Consultado sobre la decisión de echarlos por algo que estas cuatro personas habían realizado en el ámbito privado, Maiztegui aseguró: 'Yo no me meto en la vida de las personas, pero esto tomó estado público y es muy grave. No puedo permitir que sigan formando parte del staff de Salud".