Se robaron perrita en una violenta entradera

Un caso estremecedor tuvo lugar en la madrugada del viernes en una vivienda familiar en la que se encontraba un matrimonio adulto durmiendo junto a tres sobrinas, dos de ellas menores y la restante de 19 años. Según le informó la dueña del hogar a El Quilmeño, se vivieron momentos de extremos terror, gritos, llanto y desesperación, que culminó con el lamentable accionar de los criminales, que tomaron a la mascota familiar y se marcharon aduciendo que "es re caro".

Ocurrió en la intersección de las calles 205 y 251 de la mencionada localidad, cuando un grupo comando de malvivientes ingresó por la fuerza y tomó por sorpresa a las víctimas. Primero se dirigieron al dormitorio y golpearon en las costillas y en la espalda a un hombre. Luego, redujeron a su esposa y a las sobrinas, que estaban mirando una película, y empezaron a revolver cada rincón. Buscaban la suma específica de 12 mil dólares.

Nahili, la dueña del hogar, que había salido con sus tres hijos y que se salvó de milagro, expresó que ella nunca compró billetes extranjeros y que los ladrones tenían mal el dato.

Ante la frustración de no encontrar el botín que esperaban, amenazaron con secuestrar a una de las jovencitas y descuartizarla. De todos modos, se llevaron electrodomésticos, celulares, las alcancías de los niños y hasta una mochila con la que van al colegio. Pero lo que más les dolió, fue que al irse tomaron a la perrita, llamada Lima, una Bulldog Francés Merle.

La misma es pequeñita y los delincuentes la agarraron porque supuestamente tiene un gran valor de reventa en el mercado. No pensaron en el daño emocional que causaron en los pequeños, que según explicó su madre "lloran desconsoladamente" y "no pudieron dormir tranquilos".

El hecho duró menos de media hora, ya que los malvivientes desaparecieron justamente cuando Nahili tocó bocina en la puerta para que salgan a abrirle. En ese preciso instante, los cuatro criminales salieron con sus armas de fuego y les apuntaron. Sin embargo, lograron escapar a toda velocidad y, cuando la Policía llegó al lugar, todo había culminado.

La casa quedó destrozada y las víctimas, a pesar de los maltratos, no precisaron de asistencia médica.

"Los celulares son caros, pero lo que necesito recuperar es a Lima", indicó a este medio.

Por cualquier tipo de información, es posible comunicarse al 11-5492-5911 o al 11-3162-4159 (Fernando).