Debido a que la variante ómicron es el doble de contagiosa que Delta y cuatro más que la versión original del coronavirus COVID-19, un grupo de investigadores en Estados Unidos (EE.UU.) alertó que en los próximos años pueden surgir variantes más peligrosas del COVID-19 que afecten a la población mundial.
Leonardo Martínez, epidemiólogo de enfermedades infecciosas de la Universidad de Boston, destacó que la velocidad con la que se ha propagado ómicron le da la oportunidad de que pueda mutar en múltiples variantes que puedan hacer que las vacunas actuales sean inservibles para hacerle frente.
"Cuanto más rápido se propague ómicron, más oportunidades hay para la mutación, lo que podría conducir a más variantes", explicó Leonardo Martínez, epidemiólogo de enfermedades infecciosas de la Universidad de Boston, a AP.
Por su parte, el experto en enfermedades infecciosas de la Universidad Johns Hopkins, Stuart Campbell Ray, detalló que una variante se puede replicar si el portador desarrolla síntomas leves y, al interactuar con otros, después presenta signos graves de la enfermedad.
Asimismo, manifestó que, de acuerdo a sus años de experiencia, no hay motivo para pensar que con el tiempo el virus podría volverse menos letal.
En ese sentido, sostuvo que podrían darse nuevas mutaciones que también afecten a los animales e incluso no descarta la posibilidad de que se pudieran dar infecciones dobles a causa de que se formen híbridos con características de Delta y ómicron.
Prabhat Jha, doctor del Centro de Investigación de Salud Global del Hospital St. Michael, en Toronto, Canadá, explicó que lo expresado por sus colegas tiene mucho sentido y es viable debido a que en el mundo la tasa de vacunación es baja.
En específico, agregó, debido a que aún hay millones de personas que no han sido o quieren ser vacunadas en EE.UU., África, Asia y América Latina, ya que en ellos está el campo de cultivo perfecto para que se den nuevas cepas e incontables mutaciones.
Louis Mansky, director del Instituto de Virología Molecular de la Universidad de Minnesota, observó que, con tantas personas sin vacunar, "el virus todavía tiene el control de lo que está pasando".
Para frenar la aparición de nuevas mutaciones del covid-19, los científicos insisten en continuar con las medidas de salud pública, como el uso de mascarillas y la vacunación, la cual aún ofrece protección.