El Gobierno de Salta dispuso un protocolo de emergencia para evacuar 10.000 personas que residen en la zona de Santa Victoria Este por la crecida del Río Pilcomayo. Las torrenciales lluvias que viene azotando el norte de Salta, el sur de Bolivia, y parte de Paraguay, hicieron que el río Pilcomayo esté por alcanzar su máximo pico histórico de caudal en las próximas horas.
"Hemos recibido hasta el momento 126 evacuados de Santa Victoria Este. Para hoy por la tarde y esta noche esperamos mucho más. Hay que tener en cuenta que las próximas horas serán más criticas en esa zona de Salta", dijo Miguel Parra, secretario de Servicio Público de Tartagal, al diario El Tribuno.
Parra indicó que "los chicos y las mujeres están recibiendo todo nuestro apoyo y solidaridad. Todos nuestros equipos de emergencia están a su disposición. Nosotros tenemos mucha experiencia en esto cuando nos ocurrió el alud en el 2009, entonces tenemos que volcarlo hacia estas personas".
"Todavía queda mucha gente, están ayudando y cuidando nuestras cosas. Ojalá el río nos de una esperanza de no perder todo", dijo una de las damnificadas.
"Mi marido se quedó allá (Santa Victoria Este) para seguir ayudando a la gente que queda en la zona que es mucha. Tenemos mucho miedo de perder todo, ojalá el río nos de una tregua y el tiempo nos acompañe", dijo otra de las evacuadas.
Patricio, un remisero de Tartagal, se puso a disposición de los vecinos y durante toda la noche y la madrugada de hoy trabajó para transportar gente desde la zona afectada. "Todavía queda muchísima gente en la zona. Hay colectivos, autos y camionetas esperando para evacuarlos a todos", dijo y agregó que "la zona está casi intransitable lo que demuestra lo mal que la está pasando esta gente. Hay que ayudar y solidarizarnos con ellos".
La Red Solidaria está recibiendo donaciones para los damnificados a nivel nacional. En la Ciudad de Buenos Aires, el punto de recolección es en la sede de la Facultad de Economía de la UBA en avenida Córdoba 2122. Se necesita: elementos de higiene y limpieza, ropa, agua, alimentos y víveres secos, leche en polvo, fósforos y repelentes de insectos.