El esperado cruce entre los dos entrenadores emblemáticos terminó con victoria para el City de Pep: fue 2-1 ante el United, con un gran primer tiempo y Otamendi como uno de los pilares.
No importaba cómo llegaba cada uno. José Mourinho y Pep Guardiola reeditaron un duelo de estilos que ya es un clásico, y lo hicieron nada menos que en el derby de Manchester: fue victoria del City conducido por el español, por 2-1, en la casa del United.
Y en el primer tiempo, hubo una superioridad notable del City. De Bruyne e Iheanacho pusieron el asunto 2-0 y estaba más que bien, porque los dirigidos por Guardiola controlaban todo. Pero en el final de esa etapa, un error del chileno Claudio Bravo (traído especialmente por Pep, y de hecho el arquero debutó en este encuentro) salió muy mal en un centro, chocó con un compañero y le dejó servido el 1-2 al sueco Zlatan Ibrahimovic.
En la segunda etapa hubo una batalla más estratégica. Y Mourinho, pese a las modificaciones, no logró llegar al empate. Con un Pogba desaparecido (United pagó 120 millones de euros por su pase), se rindió en el derby de Manchester.