El León rugió su mística a través de los chicos del club

La historia en el Estadio Centenario comenzó favorable para el local, que a pesar de no tener la pelota, en una jugada aislada encontró en el juvenil Apaolaza su bautismo en la red con un golazo. El delantero encontró un rebote que merodeaba el área y la colgó en un ángulo, que fue imposible para el arquero visitante, para su primer festejo en la primera del Pincha.

Con el correr de los minutos, el partido mostró mayor agresividad, pero a pesar de esto los pibes del elenco de La Plata fueron siempre al frente con coraje y personalidad, empujados por su público.

Para coronar lo que era un primer tiempo ideal, Campi estiró la ventaja con un anticipo aéreo, a falta de poco más de cinco para el descanso. Pero en el único error defensivo que tuvo el Albirrojo, dos cabezazos en el área terminaron en el descuento. Lo cierto es que Kannemann hizo los dos, y luego de un rebote de Mariano Andújar, el defensor dejó con vida al conjunto brasileño.

En el complemento, el Celeste fue en busca de la igualdad pero con cierta timidez, que le impedía llegar con claridad a los últimos metros del área contraria. Y con ciertas imprecisiones, la defensa del León se agigantó y salvo algún error puntual, se las ingenió de gran manera para terminar una noche tranquila. Ahora, la vuelta promete ser apasionante contra el vigente campeón que no querrá dejar de dar pelea tan fácilmente.

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