El mundo del rugby está de luto por la muerte del jugador galés Alex Evans, quien falleció al sufrir un infarto en pleno partido entre su equipo, el Cwimllynfell RFC y el Crynant, en Gales.
Según informan medios europeos, Evans se disponía a iniciar una carrera cuando se desplomó súbitamente en el partido disputado este fin de semana, con la consiguiente preocupación entre los asistentes. Los servicios médicos llegaron rápidamente a la posición del jugador, pero no pudieron recuperar sus signos vitales, algo que, aseguran, hubiera sido posible con la ayuda de un desfibrilador.
El estadio en el que se estaba jugando el partido no disponía de uno y esto encendió la polémica en Gran Bretaña, con muchas quejas por la precariedad y falta de elementos que faciliten a la asistencia médica de urgencia en recintos deportivos.
La idea del Gobierno es incorporar desfibriladores en todas las canchas y recintos deportivos de Gales en un futuro cercano, pero por ahora sólo se trata de una propuesta elevada al Parlamento que debe ser aprobada.
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