En una clasificación que debió interrumpirse por un fuerte golpe de Lando Norris con su McLaren, Max Verstappen se quedó este sábado con la pole position en el circuito de Spa-Francorchamps, escoltado por George Russell y Lewis Hamilton, quien mañana desde las 10 defenderá la punta del campeonato de Fórmula 1.
Por novena vez en su campaña, Verstappen moverá desde el lugar de privilegio de la grilla, al que accedió después de lograr el mejor tiempo en una clasificación que fue muy complicada y se desarrolló bajo una intensa lluvia.
Al mando de un Red Bull Honda que funcionó perfecto, como en los entrenamientos, el holandés consiguió marcar su vuelta en el último intento y cuando la bandera de cuadros cerraba la sesión, con un tiempo de 1m59s76/100, y postergó a un sorprendente George Russell, que largará segundo. El campeón mundial, con Mercedes, debió conformarse con el tercer lugar sobrepasado por Russell, con un Williams más lento, quedando a .334 del mejor tiempo.
"Esto es hermoso. Gran inicio después del receso", de mitad de la temporada", dijo Verstappen. "Es una gran pista para conducir, pero muy difícil cuando está mojada", añadió el principal rival del británico en la pelea por el certamen.
Un momento dramático se vivió cuando Lando Norris, que había ganado las dos primeras secciones de clasificación, salió a mejorar su tiempo en la tercera y la pista acumulaba gran cantidad de agua; por efecto del aquaplaning perdió el control de su McLaren a la salida de Eau Rouge e impactó violentamente contra los muros de contención, dando varios giros sobre el asfalto y rompiendo completamente las suspensiones de su auto.
A pesar del golpe, Norris enseguida se comunicó con su equipo y les llevó tranquilidad, de hecho salió del auto por sus propios medios, aunque demostrando algunos dolores en sus brazos.