"Descender seguramente es mucho peor que perder la final frente a tu clásico rival. La final por más que fuese un clásico es un simple partido y habrá otras finales para jugar, pero bajar de categoría complica todo, la parte financiera, la relación con los hinchas y además abre la puerta para que los rivales te carguen", analizó Iarley en diálogo con Súper Mitre Deportivo.
Iarley, de 46 años, jugó en Boca apenas un año, entre 2003 y 2004, y bajo la conducción de Carlos Bianchi se consagró campeón del torneo Apertura 2003 y la recordada Intercontinental del mismo año tras imponerse en la final sobre el Milan, de Italia.
"Soy fanático de Boca y mi hijo de 15 años es más fanático que yo. El vínculo es muy fuerte, el club tiene magia y mi paso fue especial", recordó el brasileño, quien actualmente está radicado en Porto Alegre y trabaja en el Inter, que dirige el argentino Eduardo "Chacho" Coudet.
"Estoy en las divisiones inferiores y tengo mucho trato con Coudet. Tuvo un gran inicio en el Inter y está un poco loco, es un argentino típico", expresó Iarley.
El ex futbolista se refirió a Carlos Tevez, de quien fue compañero en Boca, y consideró que fue un error haberse ido a jugar a China durante 2017, al tiempo que destacó su decisiva participación en el reciente título de la Superliga que conquistaron los "Xeneizes".
"Tevez se tenía que haber quedado en Boca y no irse a China, porque plata ya tenía y la plata no es todo, pero en aquel momento uno tiene que tomar la decisión y a veces no es la acertada. Me sorprendió bastante su nivel este año, durante las últimas siete fechas la rompió, hizo goles, con el nivel que todos conocemos de él y fue el gran artífice del campeonato", concluyó Iarley.