La publicidad de un banco lo transformó en un actor con una popularidad masiva, difícil de imaginar, pero la fama no modificó su actitud frente a la vida.
Gonzalo Suárez sonríe, porque esa es la actitud con la que enfrenta la vida.
Su sueño de ser cineasta se esfumó después de su primera clase de teatro, de ahí en más todo fue una búsqueda que lo llevó a ser una de las caras más reconocidas de la televisión, pero con otro nombre. El de Marcos, el marido de Claudia.
Junto a Diego Reinhold, Dan Breitman, Héctor Díaz, Fredy Villareal, Victoria Almeida, Maida Andreanacci y Federico Ottone -con la dirección de Manuel González Gil- protagoniza la comedia británica "La función que Sale Mal" en el Multiteatro (Av. Corrientes 1283) una obra que requiere de un notable esfuerzo actoral, mucha coordinación en escena y un mucha destreza física.
Gonzalo Suárez es uno de los ocho protagonistas de la desopilante comedia británica "La función que sale muy mal", una obra en la que el ritmo y la destreza física hacen que el espectador no tenga respiro. Junto a Diego Reinhold son los únicos dos actores de la puesta que se estrenó en nuestro país en 2016, bajo el nombre "Como el Culo".
Imágenes capturadas con moto g05
Vinculado al mundo audiovisual, Gonzalo Suárez encontró su verdadera profesión a los 18, y se transformó -automáticamente- en el protagonista de la mayoría los videos de sus compañeros. En 2009 su vida profesional dio un vuelco definitivo al transformarse en Marcos, que junto a Claudia -la actriz Paola Barrientos- formaron la pareja protagonista de la publicidad de un importante banco nacional.
Siete años después de haber sido las caras del banco en la publicidades de televisión, radio y gráficas, la pareja de Marcos y Claudia vuelven a estar juntos, con mucho más humor y en conflicto con un ratón gigante. Cómo reaccionan sus dos hijos ante la popularidad de su papá.
Gonzalo Suárez no disimula el orgullo que siente por sus dos hijos, Pedro y Romeo, justamente con el menor -que parece seguir sus pasos en la actuación- y la participación de varios amigos famosos, viene desarrollando una ficción ligada al mundo del fútbol, mientras no ocultan su pasión por San Lorenzo de Almagro.
A pesar afrontar la vida con permanente optimismo y buen humor Gonzalo Suárez reconoce que hay una situación que lo saca de su eje automáticamente y contra la que sabe, que no puede luchar.
Entre los recuerdos de su infancia en Olivos, Provincia de Buenos Aires, Gonzalo Suárez menciona como llegó a su primera bicicleta y la historia de su buzo favorito. Su pasado en el fútbol infantil y su presente como emprendedor gastronómico y cervecero.
Gonzalo Suárez se siente con mucha energía para encarar proyectos más personales, desde tareas vinculadas a nuevos emprendimiento -por fuera del mundo artístico- hasta probar con la dirección teatral y la dramaturgia, donde sueña con poder adaptar una clásica película italiana.
Como padre Gonzalo Suárez disfruta plenamente los distintos momentos que atraviesan sus hijos -Pedro 17 de años y Romeo de 11- tratando de acompañarlos y compartir cada minuto que puede, porque es muy consciente de la velocidad con la que ellos crecen.
Gonzalo Suárez será eternamente joven. Así lo manifiesta su espíritu inquieto y vivaz y un sentido del humor admirable.
Sus trabajos en el teatro independiente, la publicidad y el doblaje le dieron la solvencia suficiente para afrontar, con mucha serenidad, que "todo el mundo te conozca" pero no sepa quien sos. O si, Marcos, el de la publicidad de tele.
Inquieto y emprendedor, no lo asustan los nuevos desafíos y avanza seguro portando su sonrisa -casi- permanente.
Gonzalo Suárez, un actor con banco.