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Raúl Velaztiqui Duarte, amigo de Natacha Jaitt y quien se reunió con ella el día de su muerte detalló qué fue lo que sucedió esa noche en el salón Xanadú
El mes pasado se cumplieron tres años de la muerte de Natacha Jaitt. Una muerte que aún no fue aclarada, una familia que pide justicia y que se acelere la investigación.
En Telenoche, Raúl Velaztiqui Duarte, amigo de Natacha, relató qué fue lo que sucedió en el salón Xanadú, el 23 de febrero de 2019, la última noche que se la vio con vida.
"Acá se cometieron dos delitos muy graves: el de la facilitación de consumo de drogas a título oneroso y la facilitación de la prostitución", dijo Velaztiqui Duarte.
"Ella se murió en 26 minutos y hay un responsable de eso. A mí me llamó la atención que, cuando nos recibió, Gonzalo Rigoni nos dijo ‘Hay algunos amigos, ¿tienen algún problema con eso?", recordó.
"Si me preguntás, yo creo que ella fue incitada al consumo", aseguró Raúl Velaztiqui Duarte, quien aclaró que no está acusando, sino "describiendo" lo sucedido. "Ella estaba en este lugar donde terminó muriendo, y con ella estaba Gonzalo Rigoni (N.R: el dueño del local)".
“La vi riendo con Rigoni y no la vi más. Como a los 20 y pico de minutos, 30 quizá, baja Rigoni. Me dijo ‘tu amiga se quedó dormida’. Entro, al sauna y la encuentro a ella sobre la cama, boca abajo”, explicó. “Ahí, él se tira arriba de la cama y la dio vuelta a Natacha. Por las imágenes de reflejos se veía cómo se llevaban botellas y copas personas que no sabía quiénes eran. Sentía que corría riesgo mi vida”, agregó Velaztiqui.
La mochila y el teléfono de Natacha
Raúl Velaztiqui Duarte fue el primer detenido por la muerte de Natacha Jaitt. Según la justicia por esconder el teléfono de la modelo. El 26 de agosto del 2020 fue absuelto por la Cámara Penal de San Isidro que desvinculó al empresario, por no considerarlo sospechoso de haber cometido un delito.
“Me fui al lugar donde la vi por última vez con él, y había un escobero. Lo abro y ahí estaba su mochila en el piso, y ahí comprendí que lo que estaba pasando ahí no era bueno. Abrí la mochila y encontré el teléfono y ahí es donde empezaron a decir que yo quise robarlo”, señaló.
“Yo soy asmático y fui a mi camioneta a buscar el aerosol. Dejé el teléfono en el asiento del acompañante y no es cierto que estaba tapado o escondido. Me doy con el aerosol y a los tres segundos viene la Policía”, remarcó.
“Yo lloraba y todo el tiempo me preguntaban por ‘el manco’. (…) Cuando yo abrí la mochila de Natacha no había dinero, pero la Policía dice en el acta de secuestro que la mochila estaba en el primer piso y que ahí había 400 dólares y 22 mil pesos”, reveló.
Raúl, testigo clave en el juicio, reveló que denunciaron a los fiscales de la causa por mal desempeño. Y explicó: “Creo que había una intención de dejarla a ella como responsable de su muerte y a mí en esa posición de entregador de mi amiga. Ofrecen mujeres, compran drogas, te las regalan. Se muere una mujer y no pasa nada. ¡No pasa nada! ¡Se murió una mujer y no pasó nada!” concluyó en su crudo testimonio.
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