Apareció Marcelo Tinelli en la inauguración del segundo negocio de su hija Candelaria. Inesperadamente habló de su futuro en la televisión vernácula pero lo hizo en su habitual tono irónico. Por lo bajo hay que leer que el conductor repartió algunos darditos. El primero contra Adrián Suar cuando le preguntaron cuándo volvía a la tele: "En algún momento voy a volver. Espero que sea en El Trece, yo lo amo a Suar".
La segunda víctima de Tinelli fue la misma Susana Giménez: "¿Susana no hizo el programa? No... la voy a llamar. Justo hablé con ella el fin de semana pasado y no me contó nada, pero claro fue el sábado ¿verdad?".
Entre pícaro, picante e irascible, Tinelli habría dejado en claro su posición en su relación con el canal y con algunas figuras de la pantalla chica. Esta semana salió a la luz que al grupo económico de El Trece ya le habría llegado la propuesta de un productor que quiere comprar el 30% de Ideas del Sur, que hoy sigue estando en manos del canal. ¿Será cierto que Tinelli espera una contestación?
Semanas atrás a través de Gustavo Sylvestre, periodista del grupo América, con la venia de Tinelli, se informó que el conductor regresaría en 2014 a la pantalla de El Trece. Pero hasta la fecha, Suar repitió: "Claro que queremos, las puertas del canal están siempre abiertas".
A esta altura de las circunstancias ya todos saben que es simplemente una respuesta empresarial llena de ambigüedades y así lo entiende Tinelli cuando el jueves a la noche le devolvió las gentilezas con un: "Yo lo amo" (por Suar).
Con Susana hizo otro tanto. En medio de la conflictiva negociación de Tinelli con El Trece, la diva de los teléfonos dijo que a Tinelli "no le vendría nada mal un año sabático". Ahora que ella la está pasando mal en Telefé, el lunes pasado pegó el faltazo, Tinelli la toreó con bastante sutileza. Se hizo el distraído con la frustrada invitación de Maradona.
Tinelli habló con los periodistas cuando se retiraba del negocio y ya dentro de su auto en compañía de su novia, Guillermina Valdés. Mientras él declaraba, la modelo hacía enormes esfuerzos para taparse la cara y que no le saltara de prepo la risa. Nunca se la había visto tan incontenible a la novia de Tinelli.
A la inauguración del segundo negocio de Candelaria asistió la familia en pleno. El conductor contó lo feliz que está con el crecimiento de ellas: "Me parece impresionante que los cuadros de Candelaria (hermana de Micaela) puedan estar plasmados en la ropa. Le agradezco a la gente.