La mediática, que está en Italia para una nueva audiencia de divorcio con Mauro Icardi, compartió en las redes sociales algunas postales de su mansión.
Wanda Nara aterrizó en la mañana de este martes en Milán, la ciudad donde vivió por muchos años, para presentarse este jueves a una audiencia por la división de bienes, en el marco de su polémico divorcio de Mauro Icardi.
De esta forma, la empresaria y el futbolista se reencontrarán luego de meses sin verse cara a cara y después de incontables escandalosos cruces en las redes sociales.
Como es su costumbre, la empresaria le mostró a sus seguidores imágenes de su lujosa mansión ubicada en el corazón de Milán. Además, enseñó los lujosos regalos que la esperaban en su casa.
Previo a su viaje, la conductora reveló que participará de los 20 años de la versión italiana del Bailando por un sueño y de un proyecto desconocido en MTV en Ibiza.
Una vez en Milán, Wanda Nara se reencontró con su increíble vestidor repleto de carteras de lujo de todos los colores y tamaños.
Según reveló Wanda en sus historias de Instagram, tendrá un recorrido por Europa similar a la de su ex pareja: Milán, Roma e Ibiza. La China y Mauro podrían asistir al Festival de Cine para una función de “Linda”, película que protagoniza la actriz.
Analía Ragonesi se presentó como una compradora más del shopping digital de Wanda Nara, aunque terminó por ser una cara visible de la primera demanda que la mediática recibió por una supuesta estafa por la compra de una remera.
El pasado 22 de mayo, Ragonesi compartió el conflicto en redes sociales e inició la denuncia en Defensa al Consumidor. Según su relato, otras personas se hicieron eco de lo sucedido y conciliaron la misma situación. En las últimas horas, la asesora se expuso ante los medios de comunicación por primera vez.
“Hice una compra en Wanda Nara Shop el 1 de mayo y esperaba recibirlo. Pagué con tarjeta de crédito. Supuestamente, me iba a llegar entre el 2 y el 5 de mayo, esperé hasta ese día y cuando vi que no había forma de hacer el tracking de la compra mandé mensajes privados a la marca. Decidí esperar algunos días prudenciales e hice la denuncia en Defensa al Consumidor”, inició Ragonesi.
Además, recordó la forma de publicitar de Nara: “Ella compartió un link a través de una historia de Instagram e iba directo a la plataforma de venta. Como es una persona con millones de seguidores, entré al link confiada y pensé que no iba a tener ningún problema”.
“No soy fanática ni nada. Vi una remera, me gustó y la compré. Me considero estafa porque hice una compra y no tengo ni la mercadería en mi poder, ni respuesta. El monto fue de $140 mil más $3 mil de envío. Eso fue por una remera de Wanda Nara”.
“Jamás pensé que me iba a pasar esto de sufrir una estafa virtual. A partir de una historia que subí en Instagram me escribieron por privado. Muchas me dicen que no se animan a denunciar y otras que dicen que lo van a hacer”, añadió.
Por último, la mujer sostuvo que, si estuviera frente a la mediática, le diría “que espero una respuesta. La gente confía en ella. Yo confié en ella y sobre todo porque fue un link que ella promocionó en una historia”.
comentar