La Superliga cuestionó a Conmebol por cambios propiciados que atentaron contra el fixture del torneo local. Los suspendidos serán reprogramados en enero, por lo que peligran los torneos amistosos de verano

Las idas y vueltas que tuvieron los partidos entre Boca Juniors y River Plate por las finales de la copa Libertadores, dejaron a la Superliga con algunos frentes de batalla abiertos: uno con la Conmebol por haber pasado por arriba del fixture doméstico sin interés por consensuar fechas y el otro con la empresa Torneos, dueña de los tradicionales torneos de verano.

Con Conmebol la rencilla comenzó con la programación del partido de ida de la final de la Libertadores: desde Paraguay la pautaron para el sábado y por cuestiones de Seguridad -y de rating-, la Superliga debió aplazar buena parte de la fecha. Lo mismo sucedió con el partido de ida trunco, pero antes desde Puerto Madero ya había salido una queja formal que jamás tuvo respuesta.

En la reunión de comité ejecutivo, los clubes resolvieron enviar una carta en la que expresaron la “preocupación, alarma y desagrado por el perjuicio que la CONMEBOL ha provocado en la competencia que aglutina a las instituciones participantes del torneo local”. En la misma carta, remarcan que las resoluciones inconsultas “han provocado un enorme daño a la competencia interna”.

“Toda esta desprolijidad en el tratamiento de fechas en 45 días provocó una invasión permanente al calendario local, que obligó a que se reprogramaran cinco jornadas que estaban organizadas desde hacía tiempo”, se completa el comunicado.

2791-DONOFRIO ANGELICI TAPIA _result.JPG

Por primera vez, la Superliga se plantea en esos términos ante otra institución -nada menos que la Conmebol- y además anuncia que estará en Asunción en 10 días durante el sorteo y definición del calendario del primer semestre de las competencias continentales.

Los clubes estuvieron de acuerdo en la redacción de la carta, pero se desató un conflicto interno a la hora de reprogramar los partidos. La gerencia de torneos advirtió que Boca y River debían tener sus partidos postergados completos antes del reinicio de la competencia en 2019 y eso supone que las fechas dispuestas por los clubes para competir en los torneos de verano -un ingreso extra-, estarán ocupadas con partidos oficiales.

En ese contexto, el presidente de Huracán, Alejandro Nadur, volvió más espesa la conversación y pidió los puntos por la postergación del clásico ante San Lorenzo. El presidente de la Superliga, Mariano Elizondo, le mostró la documentación en la que los organismos de Seguridad impedían la realización.

Con el enojo de Nadur todavía persistente, la Superliga se abrió al otro frente de combate: no Huracán, sino Torneos que tiene los derechos audiovisuales de los torneos de verano -con Superclásicos incluidos-, que con este panorama difícilmente se concreten.

Cuando termine el año, River sumará cuatro postergados: la fecha 8 ante Defensa y Justicia; la 12 con Unión; 13 en Mendoza con Godoy Cruz y la 15 en Rosario ante Central. Por su parte, Boca deberá la 12 en San Juan ante San Martín y la 15 en la Bombonera ante Atlético Tucumán.

ADEMÁS:

Nacho Scocco sigue entre algodones y sus chances siguen en baja

Angelici contó qué lo hizo aflojar para aceptar la decisión de la Conmebol

Tevez: "Nos sacaron la ilusión de dar la vuelta en el Monumental"

Contacto

Registro ISSN - Propiedad Intelectual: Nº: RL-2025-11499155-APN-DNDA#MJ - Domicilio Legal: Intendente Beguiristain 146 - Sarandí (1872) - Buenos Aires - Argentina Teléfono/Fax: (+5411) 4204-3161/9513 - [email protected]

Edición Nro. 15739

 

Dirección

Propietario: Man Press S.A. - Director: Francisco Nicolás Fascetto © 2017 Copyright Diario Popular - Todos los derechos reservados