Es que Racing le planteó la necesidad de seguir apostando por un "equipo protagonista", con la ambición de hacer
camino en el ámbito internacional, sin descuidar que hay varios chicos de la reserva que vienen pidiendo pista para tener sus primeras oportunidades, que no fueron brindadas por Cocca.
Del otro lado, Guillermo Barros Schelotto, propuso con contundencia que para lograr un salto de calidad, como se le plantea, no sólo alcanza con conservar a las principales figuras del actual plantel, sino que también aspirará a
sumar un refuerzo de peso en cada una de las líneas, y allí surgieron los nombres de
Lisandro López (ya está hecho),
Augusto Fernández, Emiliano Rigoni o el paraguayo
Víctor Ayala, para el mediocampo, y un defensor que no saldría de
Paolo Goltz o Leandro González Pírez, sin contar que también tendría que reemplazar cada una de las bajas. porque
Nelson Ibáñez, Leandro Grimi y Gastón Díaz, entre otros, podrían alejarse a fin de año. Es decir, quiere a
Bou y Lollo, sí o sí, más los nuevos, para dar pelea en los dos frentes.
En Racing, hablaron de la imposibilidad de "garantizar" que no haya ventas, pero al mismo tiempo los sedujo el espíritu y la ambición que exhibió el Mellizo, por lo que avanzarán en busca de un consenso, con esos parámetros, para tratar de resolver la cuestión antes del fin de semana, para programar la pretemporada (se haría en Mar del Plata, desde el 4 de enero) y definir
qué va a pasar con la docena de jugadores que vuelven de sus préstamos, aunque la mayoría serían cedidos nuevamente, por lo menos hasta junio.