El domingo significó para la vida de Argentinos Juniors un antes y un después, lo mismo que representó para la de Boca.
Juan Román Riquelme, el máximo ídolo de la última década dejó el club Xeneize de la peor manera y hasta prefirió esquivar su pasado reciente: "De Bianchi no voy a opinar". Pero horas después de la presentación en La Paternal, el padre del mediocampista, Jorge Riquelme, reveló conflictos internos que su hijo debió atravesar en el último tiempo y sentenció: "Los dirigentes no lo quieren".
"Se fue de Boca porque no lo quieren", aseguró Cacho en diálogo con América TV, lo que le generó a Román una incomodidad imposible de soportar por más tiempo.
"Cuando uno está mucho tiempo en un trabajo y no está cómodo, a la larga se cansa", ejemplificó al tiempo que le otorgó ese peso a la Comisión Directiva encabezada por el presidente Daniel Angelici.
Pero también la determinación de pasar a jugar en el Bicho fue por problemas con el entrenador Carlos Bianchi: "Mucho apoyo de Bianchi no tuvo".
"Nunca lo escuché a Carlos decir que lo quería públicamente", comentó, por ese mismo conflicto el jugador no quiso hablar del Virrey en la conferencia de prensa brindada en el Microestadio Malvinas Argentinas.
"Cada vez que Boca no anduvo bien con Bianchi, siempre Román salió diciendo que a este técnico hay que aplaudirlo igual de pie", expresó Jorge y aclaró que en 2013, la última etapa de Riquelme en Boca, volvió por el director técnico.
Durante la semana pasada en las sucesivas reuniones que el representante del ex Barcelona, Daniel Bolotnicoff, mantuvo con los directivos de la entidad "pasaron muchas cosas y no fue por la plata".
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