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Según medios franceses, los malos resultados son los motivos que terminarían con el ciclo del Loco en Lille. La suspensión sería para buscar una ruptura de contrato que no sea tan costosa para el club.
El ciclo de Marcelo Bielsa en Lille de Francia está pendiendo de un hilo. El club confirmó ayer la suspensión del rosarino como entrenador del primer equipo, pero no reveló cuáles fueron los motivos oficiales para tomar la decisión. Ante este escenario, algunos medios franceses ya se animan a hablar de que el Loco fue despedido de su cargo.
El motivo no es por un hipotético viaje a Chile, sino que se enfocan en los malos resultados que cosechó el equipo y el mal vínculo que tiene con los dirigentes.
La institución hizo un esfuerzo monumental para traer al Loco: gastó más de 70 millones de euros en refuerzos y acomodó el predio en base a todos los pedidos del entrenador. A pesar de esto, los resultados nunca llegaron: el Lille está anteúltimo en la Ligue 1, en puestos de descenso, con tres victorias en trece partidos jugados. El presidente del club, Gerard López, era quien más lo respaldaba, pero su crédito parece estar acabado.
“El presidente era el mayor defensor de Bielsa (...) pero había perdido apoyos internos e incluso los jugadores le abandonaron el lunes en Amiens. Se produjo una ruptura. El dirigente tomó una decisión inevitable, aunque fuese en contra de sus deseos como aficionado”, explicó una fuente cercana al club este jueves a la agencia de noticias AFP.
Pero, en todo caso, suspenderlo tiene que ver con una estrategia económica. El diario L'Equipe indica que el Lille busca ahorrarse una indemnización que rondaría los 15 millones de euros. Desde el club pretenden demostrar que el técnico fue negligente en sus funciones, indica el periódico francés.
De momento, el club anunció que creó una unidad técnica compuesta por Fernando Da Cruz, Joao Sacramento, Benoit Delaval y Franck Mantaux, para entrenar al plantel.
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