Fútbol
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El colombiano decidió cortar de manera abrupta una rueda de prensa. Estaría enojado por la atención que recibe el refuerzo Cavenaghi
Teófilo Gutiérrez sumó un segundo capítulo en este nuevo año. Luego del faltazo que pegó el primer día de entrenamiento producto de la pérdida de un vuelo en Barranquilla, ahora decidió cortar abruptamente una conferencia de prensa. La rueda estaba pactada para las 20.30 pero se presentó tarde y estuvo siete minutos. Tampoco firmó autógrafos a los hinchas que se lo pidieron.
A pesar que el padre del colombiano aseguró que el jugador no tiene problemas para seguir en el club y desea poder revertir la pálida imagen del semestre pasado, su hijo ayer en Tandil, donde se preparan los de Ramón Díaz, decidió terminar antes el diálogo con los medios.
Luego de entrenar, los jugadores se acercaron a los fanáticos que le pidieron autógrafos y fotos, pero el Gutiérrez decidió seguir su camino hacia el vestuario.
Los motivos del comportamiento deberían al trato que recibe Fernando Cavenaghi, el histórico goleador que volvió a la institución, a pesar que una de las pocas declaracioens fue: "Estoy acostumbrado a jugar con un goleador referente de área, me gusta jugar un poco más suelto, pero sabiendo que tengo la obligación de hacer goles".
También el "Millonario" posee una deuda económica con él. Solamente cobró 15 mil pesos desde su arribo.