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La aeronave apareció ayer en una zona pantanosa del delta del Paraná y en la mañana del domingo se reanudó el operativo. Los equipos de búsqueda confían en que descienda el nivel del agua y esperan la ayuda de las condiciones climáticas.
El operativo de búsqueda de los tripulantes del avión hallado ayer se intensificó en la mañana del domingo, y los equipos de rescate confían en que las condiciones climatológicas faciliten las tareas.
La zona del Delta del Paraná donde apareció el Mitsubishi matrícula LV-MCV es de muy difícil acceso a pie. Hay pozos de agua hacia abajo y vegetación que supera los dos metros de altura. De acuerdo con las declaraciones de un baqueano al canal TN, "hacer 500 metros puede llevar todo un día".
Las tareas se reanudaron a las 7 de este domingo, con la participación de efectivos de la Prefectura Naval Argentina y miembros de la Administracion Nacional de Aviacion Civil (ANAC).
Además, la jueza de la causa, Sandra Arroyo Salgado, y los abogados de las familias partieron en un helicóptero desde el aeropuerto de San Fernando hasta el lugar donde apareció la aeronave cuyo rastro se había perdido a seis minutos de su despegue, el pasado 26 de julio.
Los equipos de rescate confían en que las buenas condiciones climatológicas permitan el descenso del nivel del agua, tanto para acceder a pie como para favorecer la visión por aire.
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