
Otra ola de calor extremo azotó ayer a la ciudad de Buenos Aires y sus alrededores donde la sensación térmica volvió a superar los 40 grados, por lo que el Servicio Meteorológico Nacional elevó el alerta de amarillo a naranja, mientras que más de 30 mil usuarios permanecía afectados por cortes de luz en distintos sectores del área metropolitana, en un día en el que, paradójicamente, se anunció que el consumo de energía alcanzó un nuevo record.
Al igual que en los últimos días, una nueva jornada de calor agobiante se registró ayer en la Capital Federal y sus alrededores, donde la sombra de los árboles y edificios fue muy buscada a la hora de movilizarse por la ciudad.
Tras una mañana con temperaturas elevadas desde el comienzo de la jornada, al mediodía la sensación térmica trepó hasta los 40 grados.
Las lluvias previstas para la tarde, en la búsqueda del ansiado alivio, jamás llegaron, mientras que la probabilidad de que se registraran precipitaciones para que baje la temperatura tampoco se produjo.
Sí hubo un leve descenso en las marcas térmicas en el comienzo de la tarde, cuando a las 14 se registraron 37,6 grados de sensación térmica en Capital Federal. No obstante, una hora más tarde la temperatura alcanzó los 33,5 y la sensación térmica volvió a subir para ubicarse en los 39,3 grados.
El calor sofocante fue en aumento y a las 16 la térmica rozó los 40 grados, cuando se ubicó en los 39,7, hasta que el pico de 40,1 llegó a las 17.
Producto de esta situación, alrededor de las 20 el SMN elevó el alerta amarillo que anunció para el Área Metropolitana a principios de semana a uno de color naranja.
El objetivo es que los ciudadanos tomen medidas de prevención ante un peligro de mortalidad ahora considerado “moderado-alto”, especialmente para los bebés y niños pequeños, personas mayores de 65 años o quienes padecen enfermedades crónicas.
Ante este cuadro, las autoridades recomendaron a porteños y bonaerenses beber abundante agua a lo largo de todo el día, comer alimentos frescos y vestir ropas sueltas y claras, evitar consumir bebidas alcohólicas y protegerse del sol usando una sombrilla.
Se espera que hoy continúe el calor, ya que, según informó el SMN, está pronosticado un cielo algo nublado y una temperatura mínima de 23 grados y una máxima de 33 grados, con una elevada sensación térmica, situación que continuará al menos hasta el domingo.
Por otro lado, la ola de calor afectó a cientos de miles de usuarios de EDENOR y EDESUR a lo largo de la semana y anoche casi 33 mil permanecían afectados por la falta de suministro eléctrico.
Los usuarios sin luz son residentes de los barrios porteños de Villa Soldati, San Telmo, Parque Chacabuco, Parque Patricios, La Boca, Mataderos, Montserrat, Recoleta, Palermo, La Paternal, Villa Urquiza, Belgrano y Colegiales.
También afectaba a los distritos bonaerenses de Avellaneda, Almirante Brown, Berazategui, Lomas de Zamora, Lanús, Quilmes, La Matanza, Vicente López, Tigre, Tres de Febrero, San Isidro, San Miguel, Pilar, Morón, Moreno y Merlo.
A pesar de esto, la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (CAMMESA) informó que el consumo de energía alcanzó ayer un nuevo récord, al llegar a los 25.595 megavatios de potencia.
Mucho tuvo que ver que la sensación térmica superó los 40 grados, ya que fue a las 15.15 cuando la demanda eléctrica volvió a marcar un máximo para un día hábil, al llegar casi a 26 mil megavatios.
Así sucedió en lo que constituyó la tercera jornada consecutiva con altas temperaturas, lo cual dio envión a la demanda, que se mantuvo en altos niveles incluso luego de las lluvias.
En ese escenario, desde el martes se registró un incremento en la cantidad de cortes de luz, que en algunos casos se prolongó por más de 24 horas, según notificaron usuarios en las redes sociales a las empresas distribuidoras.
El primer día de esa seguidilla fueron más de 400 mil los hogares afectados, el miércoles la cifra fue de unos 170 mil, mientras que ayer se mantuvo en al menos 77 mil.
La Fundación para el Desarrollo Eléctrico (Fundelec) señaló que, con temperaturas inferiores a las registradas hace un año, enero presentó un ascenso de la demanda eléctrica de 0,9% en comparación con el mismo período de 2016, luego de cinco meses consecutivos de descensos.
La entidad subrayó que enero último se ubicó “en el primer lugar de los consumos históricos” y argumentó que “principalmente, el alza en el consumo se registró en los usuarios residenciales con un 0,4% y comerciales con un 4,3%.