La polémica por el arribo al aeropuerto internacional de Ezeiza de un avión venezolano con 19 personas a bordo, 14 de ellas de ese país y las restantes iraníes tiene diferentes aristas. Al conflicto diplomático y político se le sumó el que está relacionado con parte de su carga, ya que trascendió que dentro del Boeing 747 había autopartes que venían desde México para la Argentina.
Se trata de piezas destinadas a la fabricación local del modelo Taos que Volkswagen produce en su centro industrial de General Pacheco. Al quedar vinculada a este entuerto, la automotriz salió a deslindar su responsabilidad.
"Volkswagen Argentina manifiesta expresamente que no tiene relación alguna con la situación del avión Boeing 747-300 de transporte de cargas de origen venezolano. Volkswagen Argentina S.A compra a Faurecia SAS Automotriz los asientos y panel de instrumentos para el modelo Taos de producción nacional suministrados por SAS. La relación entre el forwarder (agente de carrera) y la compañía aérea para que las piezas para la producción de las mencionadas partes lleguen a la Argentina es algo que Volkswagen Argentina desconoce y no tiene relación alguna con los hechos sucedidos", explicaron.
Desde la compañía agregaron que "Volkswagen Argentina S.A cumple todas las normas internacionales y de ética y compliance (cumplimiento de normas y códigos éticos en compañías) en relación a la contratación de sus proveedores".
Por su parte, la autopartista SAS Automotriz, que es parte del grupo francés Faurecia, aclaró que se contrató el avión para "el transporte de componentes destinados a la producción de paneles de instrumento y asientos para el modelo Taos, provenientes de la ciudad de Querétaro, México". Es que en México también se fabrica el Volkswagen Taos, pero en este caso para comercializarlo en los mercados de Norteamérica.
”La relación entre el forwarder y la compañía aérea para que las mencionadas piezas lleguen a la Argentina es algo que SAS Automotriz Argentina SA desconoce y no tiene relación alguna", añadió la empresa a través de un comunicado.
Mientras la causa avanza, y el juez federal de Lomas de Zamora Federico Villena dispuso allanar y prohibir la salida del país a los tripulantes del avión retenido en Ezeiza, la carga fue liberada tras el correspondiente control aduanero.