El accidente se registró aproximadamente a las 4 en la avenida Garay al 700, en su intersección con Piedras, y el conductor de 34 años que manejaba un Ford Focus que perdió el control registró un nivel de 1.94 gramo de alcohol en sangre, cuatro veces más que el máximo permitido.
Los autos dañados fueron un Renault Sandero, un Chevrolet Prisma, un Volkswagen Up, un Fiat Linea, un Fiat Siena y un Volkwagen Golf, según informaron a Télam fuentes policiales.
Uno de esos automóviles presta servicio de taxi y, por el impacto, terminó arriba de la vereda y chocó, a su vez, contra un árbol.
Según el relato de los vecinos, tras chocar a los autos y a una moto, el conductor terminó la seguidilla con su rodado "dado vuelta".
"No hubo víctimas fatales porque estábamos durmiendo. Nos dijo que se quedó dormido", relató el dueño de uno de los autos afectados.
En el caso interviene la Fiscalía en lo Penal, Contravencional y de Faltas número 12 y, tras conocerse el resultado del test de alcoholemia, se dispuso un acta contravencional, la inhibición para conducir para el implicado por tiempo indeterminado y el secuestro de su vehículo Ford Focus.
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