Los usuarios del subte recibieron este viernes un nuevo golpe al bolsillo, ya que el servicio por tomar cualquier tren de las seis líneas que recorren la Ciudad de Buenos Aires recibió un incremento del 40 por ciento para quedar con una tarifa de 42 pesos.
El nuevo cuadro tarifario fue aprobado mediante una audiencia pública realizada el pasado 26 de agosto con representantes de la empresa, del área gubernamental y de la Defensoría de las Personas.
El ajuste tarifario también contempla al premetro, que con este impacto tiene un valor de 15 pesos.
Además, jubilados, pensionados, personas con discapacidad, trasplantados y estudiantes primarios y secundarios seguirán viajando gratis, mientras que habrá una tarifa diferencial y con descuentos para quienes reciban una ayuda social.
El abono social está destinado a beneficiarios de planes sociales administrados por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, del programa Ciudadanía Porteña, beneficiarios del Plan Jefes y Jefas de Hogar, personas en situación de desempleo crónico o recurrente y personas que acrediten poseer ingresos familiares que se encuentren por debajo de la canasta básica familiar que publica el INDEC.
Se suman a los descuentos, los que reciben subsidio por la tragedia de Cromañón y excombatientes de Malvinas.
Según explicaron desde la parte empresaria, el aumento se implementa "con el objetivo de seguir garantizando el mantenimiento y correcto funcionamiento del servicio, y en línea con la actualización tarifaria implementada por el Gobierno Nacional para el resto del transporte público del AMBA".
Se recordó también que continuará vigente el descuento de la Red Sube y el beneficio para pasajeros frecuentes, que contempla que el usuario se le aplican automáticamente descuentos de 20%, 30% y 40% una vez que se superen los 20, 30 o 40 viajes mensuales respectivamente.
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