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Se trata de seis cámaras para aplicar sanciones a los conductores, en una vía que cuenta con un triste record: es la que más víctimas fatales en siniestros viales registró durante el año pasado en Capital Federal.
Las fotomultas regresaron a la avenida General Paz, luego de que ayer comiencen a funcionar para realizar las seis cámaras de esa vía que sirven para sancionar a quienes superen la velocidad máxima, en una medida que busca tender a una mayor concientización vial.
Se trata de una vía que tuvo en 2018 la mayor cantidad de víctimas fatales por siniestros viales de la ciudad de Buenos Aires, de acuerdo a lo que señalaron fuentes del gobierno porteño sobre la avenida, la máxima permitida es de 80 kilómetros por hora, excepto desde Libertador hasta Acceso Norte, donde la máxima es 100.
Según informó la administración que conduce Horacio Rodríguez Larreta, las cámaras están ubicadas en el cruce con la avenida Balbín (en ambos sentidos) y en las calles Santo Tomé (km 13.1) y Corrales (km 22.5) en el sentido al Río de La Plata. En dirección al Riachuelo, las cámaras se encuentran posicionadas en Mosconi (km 10) y Tapalqué (km 17.5).
"De cada 10 siniestros viales ocurridos en la Ciudad de Buenos Aires, en seis el principal factor es el exceso de velocidad", aseguró Paula Bisiau, subsecretaria de Movilidad Sustentable y Segura de la Ciudad. De hecho, durante el año pasado la avenida General Paz registró 16 víctimas fatales, lo que la convierte en la vía con mayor cantidad de víctimas en la Capital Federal.
En ese aspecto, Bisiau apuntó que "1 de cada 10 víctimas fatales que se registraron en la Ciudad se reportó en la avenida General Paz" y detalló: "Junto con acciones de concientización, la incorporación de cámaras permite mejorar el control, convirtiéndose en una de las herramientas clave para generar cambios de hábitos en los conductores".
Si se toma en cuenta desde 2015, en estos cuatro años se registraron 58 muertes por siniestros viales en esta arteria. La mayor parte de los episodios fatales suceden en horas de la madrugada, puntualmente entre las 2 y las 8, mientras que, con relación a los días, se dan desde el viernes por la tarde hasta el lunes a la mañana, lo que coincide con los fines de semana y el eventual exceso de alcohol de los conductores.