El presidente de los Estados Unidos aseguró ante sus asesores que comenzará el accionar bélico contra la nación iraní, según confían los medios norteamericanos.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aprobó unos planes de ataque contra Irán, pero evitó dar la orden definitiva para esperar que Teherán abandone su programa nuclear, según informó este miércoles el diario local The Wall Street Journal.
El mandatario estadounidense lo aseguró ante sus altos asesores, con quienes conversó luego de que se retirara intempestivamente de la cumbre del Grupo de los 7 (G7), según comunicaron fuentes cercanas con las deliberaciones.
De acuerdo al medio, el jefe de la Casa Blanca está considerando múltiples opciones, incluido un ataque contra Irán. Un reporte con el cual también coincidió Axios.
Cuando se le preguntó públicamente sobre la posible adhesión de los Estados Unidos a los ataques israelíes contra Irán, Trump respondió de forma ambigua. "Puedo hacerlo. Puedo no hacerlo", comentó.
"Durante 40 años estuvieron diciendo 'muerte a EE.UU., muerte a Israel, muerte a cualquier otro' que no les gustara. Eran matones. Eran matones de patio de colegio. Y ahora ya no son matones. Pero veremos qué pasa", manifestó. En este sentido, proclamó: "Dos palabras muy simples: rendición incondicional".
Por su parte, este miércoles el secretario de Defensa, Pete Hegseth, enfatizó ante el Senado norteamericano que el Pentágono "está preparado para ejecutar" cualquier decisión sobre Irán.
Desde la madrugada del 13 de junio, cuando Israel lanzó un ataque "preventivo" contra Irán, las dos naciones han estado intercambiando bombardeos.
El ministro de Exteriores de Irán, Seyed Abbas Araghchi, indicó que el país hebreo, con sus ataques, quería socavar las negociaciones pacíficas entre Irán y los Estados Unidos sobre el programa nuclear de la nación persa.
En este contexto, recordó que el domingo pasado debía celebrarse la siguiente ronda de negociaciones con Washington en Mascate, Omán. Aseguró que Teherán "confía en el carácter pacífico de su programa nuclear" y quería seguir las negociaciones para presentar su propuesta para un nuevo acuerdo nuclear.
Rusia, China y numerosos países del mundo han condenado con dureza la ofensiva israelí, calificándola de grave violación del derecho internacional y de la Carta de la ONU.