El Papa Francisco celebró la misa de Pascua de Resurrección en el Vaticano y pidió “que el señor ponga fin al avance de armas” y que terminen los conflictos en todo el mundo.
El Sumo Pontífice rezó por los que sufren "situaciones económicas difíciles" en América Latina: "Que la alegría de la Resurrección llene los corazones de todos los que en el continente americano sufren las consecuencias de situaciones políticas y económicas difíciles”.
Y se refirió puntualmente a Venezuela, al reclamar “medidas concretas" para resolver la crisis. "Que el Señor conceda a quienes tienen responsabilidades políticas trabajar para poner fin a las injusticias sociales, a los abusos y a la violencia, y para tomar medidas concretas que permitan sanar las divisiones y dar a la población la ayuda que necesita", expresó frente a más de 60.000 personas que se congregaron para escuchar sus palabras.
Desde la Basílica de San Pedro, Francisco se refirió a la situación en Nicaragua y pidió "que el Señor resucitado ilumine los esfuerzos que se están realizando" en ese país "para encontrar lo antes posible una solución pacífica y negociada en beneficio de todos los nicaragüenses".
Sri Lanka: al menos 158 muertos y más de 400 heridos por explosiones en iglesias y hoteles
En su séptima Pascua como Papa, Jorge Bergoglio habló sobre los conflictos mundiales que preocupan al Vaticano, entre los que mencionó: "esperanza para el amado pueblo sirio, víctima de un conflicto que continúa y amenaza con hacernos caer en la resignación e incluso en la indiferencia".
El Sumo Pontífice también expresó: “es hora de renovar el compromiso a favor de una solución política que responda a las justas aspiraciones de libertad, de paz y de justicia, aborde la crisis humanitaria y favorezca el regreso seguro de las personas desplazadas, así como de los que se han refugiado en países vecinos, especialmente en el Líbano y en Jordania"
En ese marco, renovó sus pedidos por los conflictos entre Israel y Palestina, y en Yemen. Francisco pidió además por Libia, "donde en las últimas semanas personas indefensas vuelven a morir y muchas familias se ven obligadas a abandonar sus hogares".
En esa línea, pidió por el "amado continente africano, lleno todavía de tensiones sociales, conflictos y, a veces, extremismos violentos que dejan inseguridad, destrucción y muerte, especialmente en Burkina Faso, Mali, Níger, Nigeria y Camerún", además de referirse a Sudán y Sudán del Sur.
Por último, se refirió a los atentados de Sri Lanka: “Me enteré con tristeza y dolor de los atentados que han traído dolor a las iglesias de Sri Lanka".
"Queridos hermanos y hermanas, ¡Cristo vive! Él es la esperanza y la juventud para cada uno de nosotros y para el mundo entero. Dejémonos renovar por Él. ¡Feliz Pascua!", concluyó Francisco.